CAPÍTULO DIECISIETE Con Scarlet dormida en sus brazos, Caitlin caminó con Caleb por el camino a través del bosque detrás de Aiden. Caleb sostenía a Ruth; estaba gravemente herida pero aún estaba con vida. Parecía que podría sobrevivir -aun con la enorme cicatriz en su rostro donde la habían atacado. Siguieron a Aiden en silencio por el sendero que daba vueltas y más vueltas hacia la profundidad del bosque. Los demás habían regresado al castillo a pedido de Aiden, y los habían dejándolos solos. Había algo que Aiden tenía que discutir con ellos y, claramente, quería privacidad. Mientras caminaban, Caitlin estaba tan agradecida de tener a Scarlet de vuelta, y viva. Su mente aún estaba conmocionada con la noticia. Scarlet. Un vampiro. Su hija. Había tantas preguntas que ardía en deseos de