—A ver, Laura, ¿Quieres que crea que te encontré con el tipo encima de ti y no hicieron nada? — Estoy en el comedor bajo el interrogatorio de Mel, tamborileo mis dedos sobre la mesa mientras ella me señala con la cuchara, es la hora de almorzar y creo que una buena sopa se está arruinando por aquí; arquea una de sus cejas, está esperando una respuesta —Mel, en serio, no pasó nada, no tuve sexo con él, solo nos estábamos besando y…— —Y yo me chupo el dedo, ¡wow! Pasamos de que ya no creías en el amor a un te estás acostando con un demonio — Suelta mientras se dispone a comer su sopa, suspiro y le pongo cara seria, tiene razón, si fue una escenita caliente, pero ¿tanto le cuesta creer que no llegamos al home run? —Mel, mira, no estoy para rodeos, me disculpo porque él estuviera aquí e