—¡aaah no puede ser, este hombre me gusta demasiado. Me gusta hacer el amor con él. Vamos Tessa, no te puedes enamorar, él es solo un juego… pero ayy, mira cómo me ve, se ve que está muy enamorado, y me encanta mucho su cara, su cuerpo, su personalidad, y de paso es muy bueno en el sexo…. ¿Qué hago ahora? ¡Creo que me estoy enamorando! — se decía Tessa así misma mentalmente, un poco preocupada, desnuda en la cama abrazada, viendo de frente a Kent jones.
—¡Brandy, creo que te amo, estoy muy enamorado de ti! Lo siento si no te gusta, o si es muy apresurado esto. Pero no puedo engañarme más, TE AMO Y QUIERO QUE SEAS LA MUJER DE MI VIDA. QUIERO QUE SEAS MI ESPOSA. Perdóname si lo que te estoy diciendo es muy pronto, pero no puedo engañar a mi corazón. ¡No te molestes conmigo por favor, solo digo lo que siento! — exclamó Kent jones desnudo abrazando a Tessa mirándola fijamente a sus ojos.
Tessa se queda callada y muy atónita por las palabras que expresó Kent, y mentalmente se decía: —¡nooo, no puede ser. Ahora quiere que sea su esposa. ¡!Eso es imposible!! pero es que mira su cara …este hombre es el hombre perfecto. Pero no puedo estar con él… Seria todo un riesgo… ayy nooo… Tessa no te enamores de él... ¡Recuerda que es solo un juego! —
Kent un poco preocupado, porque Tessa no contesta, le toma una de sus manos y le dice: —¡Brandy, perdóname por lo que te dije! Podemos ser lo que tú quieras, pero por favor no me dejes, nunca he conocido a una mujer, así como tú en mi vida. Es que siento una conexión muy fuerte contigo, esta conexión no la he sentido con ninguna otra mujer en toda mi existencia. Si no quieres que seamos nada, bueno, seremos lo que tú quieres que seamos, pero por favor no te separes de mí. ¡No quisiera perderte nunca en la vida! —
Tessa un poco preocupada lo mira y se dice mentalmente: —¡nooo por favor no sigas, cada vez que hablas me enamoro más de ti. Bueno Tessa tienes que ocultar y reprimir lo que sientes, si te enamoraste de este hombre. ¡RECUERDA QUE NO PUEDES HACERLO, NO TE PUEDES INVOLUCRAR CON NADIE, ¡NO PUEDESSSS! —
En ese mismo instante Kent la besa y le dice: —¡está bien Brandy, me puedes responder cuando te sientas lista, no te preocupes. Aun así, si no quieres tener nada conmigo, lo entenderé, eres una mujer muy hermosa, y tienes a un montón de hombres detrás de ti. ¡Te entiendo si no quieres nada conmigo, sé que tú eres mucho para mí! La verdad nunca pensé que me harías caso. Te veías muy difícil, pero al conocerte, vi que congeniamos muy rápido, y que hablar contigo era muy fácil.! —
Tessa lo queda mirando muy enamorada y mentalmente se dice: —¡ayyyy que bello es, y si es muy fácil hablar contigo, es que tenemos muchas cosas en común! —
Luego Kent toma su mano y le dice: —¡también debo confesarte que, aunque pretendo ser todo un tipo fuerte por fuera, por dentro soy muy cobarde, ¡y más con las mujeres así hermosas como tú, y más con tu impresionante cuerpo y rostro. Bueno esto que te cuento nadie lo sabe, ahora lo sabes tú. ¡Pero te entiendo si no quieres a un estúpido cursi a tu lado! —
Tessa le dice un poco preocupada: —¡no… no digas eso, lo que pasa es que me tomó por sorpresa lo que me dijiste, no sabía que te gustaba tanto la verdad, pero me alegra mucho saber que te gusto así al punto de que me digas te amo. Es la primera vez que me dicen algo así, pero ¿cómo se si no me estas mintiendo?! —
Kent le agarra su rostro y la comienza a besar muy sensualmente, Tessa por dentro grita y dice: —¡nooo… ay Dios mío, besa tan rico, no puede ser... creo... creo... que me enamoré de este hombre, ya caíste Tessa! — Kent detiene el intenso beso y se coloca encima de Tessa y agarrándole su rostro le dice: —¡yo no le miento a nadie, y eso lo hago porque no me gusta que me mientan a mí. También te digo, que soy un hombre de palabra en todo lo que hago, en mi empresa y lo mismo pasa en mi vida personal. Por lo tanto, no tengo tiempo para engañar a alguien. Pero si te digo algo, y esto que siento es verdad, así que te amo y eres la mujer de mi vida. Se que apenas llevamos 1 mes conociéndonos. Pero repito, siento que tú eres mi alma gemela, y tampoco esto no es un capricho. Si lo fuera, no haría que perdieras tu tiempo tampoco. Mis sentimientos son ciertos, y como me siento contigo creo que nunca amaré a ninguna mujer que seas tú. ¡Se que suena muy loco para solo tener un mes contigo, pero me siento perdidamente enamorado de ti! — y queda viendo a Tessa fijamente con sus enormes ojos verdes estando encima de ella.
Tessa suspira porque le encantó todo lo que dijo. Pero se queda callada, no dice nada. Luego Kent comienza a besar todo su cuerpo y Tessa siente mucho placer y se dice así misma mentalmente: —¡Diosss mío, este hombre besa muy rico… en que te metiste ahora Tessa! — en ese instante Kent para de besar su cuerpo y le dice a Tessa: —¡ningún hombre te va a querer como yo te quiero, y te hará el amor como yo te lo hago ¡Eso tenlo por seguro! — y esta vez comienzan hacer el amor nuevamente pero más intenso. Mientras Kent le hace el amor intensamente a Tessa, ella está en el clímax de su excitación, y se olvida de todo, porque al parecer se ha enamorado de ese hombre. El sexo es intenso, porque aparentemente ambos son almas gemelas. Sin embargo, esta vez, Tessa deja de lado algo muy importante por primera vez… y eso es …LA HORA….
Boston, Massachussets, año 1992
Unas vecinas chismosas detienen a Rose Wallas , madre de la pequeña Teressa Wallas, de cariño su familia le decía Tessa, la cual nació el 6 de septiembre de 1992, y le dicen muy entrometidas: —¡hola Rose, nos dijeron que tuviste otra niña, queremos ver como es, la tuviste hace dos meses y no nos las has enseñado, no entiendo porque, si cuando nació Emily, ahí mismo fuiste a nuestras casas a mostrarla con el coche, no entiendo cual es tu misterio, ven enséñanosla, seguro es bella como su hermana Emily!— Rose un poco preocupada, les quita la mano del coche, para que no suban una mantita rosada que ella le tenía por el frio y les dice a las vecinas chismosas: —¡sí, ella es como Emily, pero ahora duerme, no quiero que se despierte, y no se preocupen, después se las enseño ok !— y se retira muy apurada y nerviosa de donde estaban las mujeres.
Las vecinas chismosas eran tres, una se llamaba Rita, ella siempre era muy callada, tenia como unos 40 años de edad. Era de tez blanca, un poco largurucha, muy delgada, de cara un poco alargada, ojos grandes azules y de nariz muy finita, ella siempre vestía con faldas largas y camisas de colores oscuros. Luego estaba Helga, ella era pelirroja, un poco bajita, de cabello corto como de unos 45 años de edad, de contextura grande, tenía la cara redonda, y sus ojos eran achinados debido a sus grandes cachetes rojos, y le gustaba siempre usar vestidos de flores. Y por último estaba Berta, ella era la líder del grupo. Ella era la más mayor de todas, tenía como unos 50 años de edad, era de descendencia mexicana, su piel era color canela, de baja estatura, media como 1 metro 50 cm, tenía el cabello canoso corto, y era de contextura gruesa; ni gorda, ni delgada. Ella siempre vestía de pantalones anchos y camisas de rayas. Entonces, en el momento que se retira la señora Rose, Berta con cara de intriga, les dice a las otras dos mujeres: —¡ay no sé, pero esta mujer si es rara, no sé porque quiere ocultar a su hija, si su hija Emily es muy bella, no la entiendo! — Luego Helga que era una de las mas chismosas le dice: —¡bueno la verdad no sé, algo se trae, a lo mejor no quiere que le echen mal de ojo a su hija. ¡Mira que esa mujer Rose es un poco rara! — Bertha le dice: —¡mmmm ¿y ustedes creen que ella crea en la brujería?!— Helga la más chismosa le dice: —¡yo creo que sí, ella es muy rara, no se. Siempre ha tenido una vibra un tanto extraña ¿no creen?!— Bertha con cara de intriga le dice: —¡sí, yo también creo eso, a lo mejor ella que es una bruja, cree que nosotras somos las brujas. ¡Ellas son así, siempre desconfían de todo el mundo! — Rita la más callada del grupo les dice: —¡bueno ya mujeres dejen de estar inventando cosas, a lo mejor ella no quiere que vean a su hija porque está muy pequeñita. Los bebes cuando están pequeños, ellos son muy susceptibles a enfermedades. Por eso es que ella la tapa y no quiere que nadie se le acerque a su bebé. Dejen de estar inventando cosas. Además, si esto que ustedes están hablando, de que le están diciendo que es bruja, llegara a los oídos de Ofelia, la más chismosa del barrio, va a regar por todos lados que ustedes le andan diciendo bruja a Rose. Así que, andando chicas, ¡vamos a nuestras casas a cocinarles a nuestros hijos! —
—¡ahhh como siempre tú de aguafiestas, solo estábamos haciendo una suposición, no que ella es una bruja como tal. Solo estábamos dando una pequeña opinión, del comportamiento raro de Rose. Pero si, tienes razón, que esto quede entre nosotras. No vaya a ser que la Ofelia después nos vaya a delatar de chismosas y le diga a Rose que nosotras le dijimos bruja jejeje. ¡No queremos ningún problema con ella! — exclamó Bertha la líder del grupo.
Luego Helga se acercó a ellas y les dijo murmurando: —¡sí, no la hagamos enojar, a las brujas no hay que hacerlas enojar! — Rita en ese instante, le pegó un golpe con un abanico que ella tenia y le dice: —¡mujer, que no es una bruja. Deja de decir esas cosas o si no te vas a meter en serios problemas, por andar inventando rumores. Vamos, vamos, ve a tu casa. Y tú también Bertha, ¡vámonos ya a nuestras casas! — les decía Rita, empujando a cada mujer para que fueran a sus casas hacer los que haceres del hogar.
Por otra parte, estaban los Wallas, la familia de Rose, la mujer de quienes las chismosas estaban comentando. Ellos eran una familia de clase media baja, que vivían en Quincy, un barrio ni muy rico, ni muy pobre, de la ciudad de Boston en el estado de Massachusetts Estados Unidos. La familia Wallas estaba conformada por: Rose Ritter, la madre de Tessa. Ella era una mujer muy hermosa. Era rubia, de ojos color avellana, alta, de 1 metro con 70 centímetros, nariz respingada, con un cuerpo muy hermoso de piernas largas. Cuando se vestía, lo hacia muy elegante. Pero no lo hacia mucho, porque siempre estaba con el uniforme de su trabajo. Ella trabajaba en una peluquería cerca de su domicilio, y todas las mujeres la conocían como la estilista Rose. Ella contaba con unos 30 años de edad. A esa edad ya tenia dos hijas. Emily de 5 años y Tessa de 2 meses de edad. Ella estaba casada con Derek Wallas, el padre de sus dos hijas, el cual tenía 31 años de edad. Derek no era muy bien parecido que digamos. Él era bajito, media 1 metro con 50 centímetros de estatura. Él era de descendencia ítalo- inglesa; Derek no sacó el gen ingles de su padre, sino el gen italiano de su madre. Los que lo conocían decían que se parecía a una versión más fea del actor Danny Devito, con ojos azules, pero a él no le importaba lo que dijeran. Ya que, a pesar de su apariencia, había conquistado a una hermosa mujer. A su vez, Derek era muy seguro de si mismo, y tenia muy buen sentido del humor. Esas dos cualidades, fueron las que atrajeron a Rose. Además, él era un amoroso padre con sus dos hijas, y estaba muy contento por el nacimiento de su hija menor, Tessa. Asimismo, Derek era un mecánico, era uno de los mejores, él trabajaba cerca de su casa, su sueño siempre fue tener un taller propio, para tener más dinero, y que su esposa Rose no trabajara, y que sus hijas pudieran ir a la universidad. También era un muy buen cocinero, así que cuando salía del taller, lo primero que hacia era cocinarle a su esposa Rose, cuando ella venia del trabajo. Después estaba Emily de 5 años, ella salió rubia a su madre, y con los ojos azules de su padre Derek, su cabello era liso ondulado, y todas las personas del barrio tenían que ver con Emily. En su colegio siempre la escogían para ser la reinita del salón.
Seguidamente, la familia también vivía con la madre de Derek, doña Franchesca Ricci, ella era una señora de 65 años, de estatura muy baja, media como 1 metro con 45 centímetros, de pelo muy canoso corto y de tez muy blanca, tenía muchos lunares en su cara. Ella cuidaba de su nieta Emily, cuando Rose o Derek no estaban en casa. En ese instante, Doña Francesca, ve que Rose entra muy acelerada y le dice: —¡muchacha que te sucede, ¿porque vienes tan acelerada?!— Rose cierra la puerta y le dice: —¡ahhh las vecinas chismosas me interceptaron de nuevo, así que bueno, no pudieron ver a la niña! —
La señora Francesca un poco molesta le dice: —¡pero ¿y porque no quieres que vean a la niña? Ella nació muy hermosa, sacó mi gen italiano Ricci, yo amo mucho a mi nieta, ella es tan bella como su hermana Emily. ¡Mis dos nietas son muy hermosas! — Rose ve a la señora Francesca con desagrado y le dice: —¡abuela, eso lo dices porque Tessa es tu nieta, pero vamos no nos engañemos, ella salió un poco feíta! — la señora Francesca se levanta de su silla, y muy molesta le dice: —¡¿Cómo vas a decir eso de tu hija Rose? Para ningún padre, ningún hijo es feo ¿Por qué piensas eso de la pobre Tessa? te prohíbo que le digas que es fea en todo su crecimiento. ¡O si no le vas a crear un complejo de inferioridad! — Rose un poco disgustada porque la señora Francesca le estaba gritando le dice: —¡ella es mi hija, señora Francesca, y yo la criaré a mi modo! —
La señora Francesca le dice: —¡¿entonces para que yo estoy aquí? ¿solamente de niñera? Te prohíbo que le digas que es fea a la niña. ¡Debes criarla con mucho amor, y muy segura de sí misma para que no se sienta mal! — Rose le dice con cara de molesta: —¡yo le voy a decir lo que yo quiera señora, ella es mi hija. Y si crece fea, pues hay que decírselo para que sea fuerte ¿no cree?!—
En ese instante, la señora Francesca calla por un momento, y le dice: —¡pues sí, tienes algo de razón, pero no la vayas a tratar mal. Si lo haces, le diré todo esto que estamos conversando a Derek, y no te gustaría que tu esposo estuviera molesto contigo ¿o sí?!—
Rose no quiere que su esposo este molesto con ella, entonces le hace caso a las palabras que dijo la señora Francesca y le dice: —¡está bien, pero bueno, no quiero que los vecinos se burlen de ella, por eso es que la escondo. Es que mire su cara, ¡no es muy bonita! — la señora Francesca le grita diciéndole: —¡QUE SE VAYAN AL INFIERNO LOS VECINOS, que piensen lo que quieran! Total, ellos no son los que ponen pan a tu mesa. Tú no te avergüences de tu hija y punto. Se que Emily es la más querida del barrio por su belleza. Pero Tessa también lo será…. Mira cómo se ríe... ella es una bebé muy alegre. ¡Seguro salió con la personalidad de su padre! —
Rose se alegra un poco y se le sale una lagrima, al ver que su hija Tessa se reía, a pesar de que estaban discutiendo y dijo: —¡si es verdad abuela Francesca, Tessa va ser una niña muy alegre. Miré, a pesar de que estamos hablando duro, ¡ella se está riendo…! — y comienza a abrazar a su pequeña y le dice: —¡no te preocupes mi cielo, perdóname por lo que dije anteriormente, me encargaré que seas una niña muy feliz, y que siempre estés sonriente.! —
Y la abuela abrazó a Rose y le quitó a Tessa de sus brazos y le dice: —¡mi nieta hermosa, siempre serás una niña muy alegre, eso te lo prometeremos! —
En ese instante llega su padre el señor Derek junto con Emily y le da un beso a su esposa, y carga a su hija Tessa y le dice: —¡ayy como está la pequeña más linda de esta casa! — luego Emily lo ve y le dice: —¡¿y yo papi, no soy también la linda de la casa?!— el señor Derek le da un beso a Emily con Tessa en sus brazos y le dice: —¡tú eres la reina pequeña de la casa por ser la mayor y Tessa la princesa porque es la más chiquita. Mama y la abuela son las diosas de la casa. y yo soy el rey jejeje! — Emily se alegra mucho por las palabras que dijo su padre, y también le da un beso a la bebita. Luego Derek dice: —¡aaah es que Tessa se parece mucho a mí, ella será una mujer muy bella! —
En ese momento, Rose y la abuela se quedan viendo de reojos, porque saben que el físico de Derek no es muy bonito que digamos. Y la abuela cambia la conversación y le dice: —¡bueno vamos a comer tengo mucha hambre… dame a la bebita y haz tus especialidades hijo mío! — y Derek muy contento y feliz le cocina a su familia a quien el tanto adora.