Un asunto menos por resolver. A pesar de las quejas de mi padre y de los muy válidos argumentos de Lucas a partir de hoy he dejado de trabajar para la empresa de mi padre. Sé que me espera una charla muy intensa con él, pero no es momento de pensar en ello ahora. Esta noche es una muy importante para mí; hoy es mi tan ansiada cita con ese hombre de ojos azules que ha conseguido volverme loca desde la primera noche que lo he visto. No quiero pensar en Raúl y su evidente cara de degenerado. No quiero pensar ni en mi padre y su interrogatorio de donde iré a trabajar. Sólo quiero pensar en Lucas, en mí, y en esta noche que nos espera. Al pensar en sus besos mis mejillas toman un color aún más rojo que el del vestido que llevo puesto. No sé qué es lo que él ha preparado para nosotros hoy, pero