-------------DEMIAN - - - - - - - -
Esa mujer era un enigma, tantas cosas por descubrí, la había investigado pero se sabía poco de ella, incluso si ese era su nombre verdadero, no se por que ella me interesaba, tan hermosa e indomable, una mujer que me hacia latir el corazón de emoción, necesitaba hacerla mía, tenerla sumisa ante mi, me clavaba el alma con esa oscura y fría mirada.
-Ohh... Ya veo entonces lo que estás diciendo es que yo hice qué regresaras a esa vida de asesina.......tienes razón, tengo que admitir qué eres una mujer bastante fuerte pero no tienes comparación con mi propia maldad, yo mato por diversion y tu por dinero -.
Ella se rió de mi en tono de burla, como si no fuera solo por dinero, desde se calmo y me miró con un brillo en sus ojos y una sonrisa macabra. - Así es, lo había por dinero pero quien decí qué no me divertía cuando mataba -.
Lo decía en un tono de emoción, podía decir que no metia, su voz era suave y tranquilidad al decir esa palabra. -Me fascinaba verlos y escucharlo suplicar por sus vida mientras los torturaba .... Era un deleite verlos arrastrarse bajo mis pies -.
Sonreí y no deje de verla, esa expresión qué hacia era increíble, estaba completamente sorprendido al ver tanta maldad en su alma y corazón.-"¿Entonces estas diciendo que te gusta ver a las personas sufrir y rogar por sus vidas antes de matarlos?, wow..... Tiene una forma interesante -.
Puse mis manos en su cadera, las subía y bajaba por su cintura sin quitarle la mirada de encima. - Eres casi tan mala como yo, solo que te falta experiencia para rivalizar conmigo. No sabes lo qué puedo ser capaz.... Puedo ser tan cruel qué ni tu misma te lo puedes imaginar -.
Me miraba con odio y repudio, se notaba qué estaba decidida a acabar de una vez conmigo, yo seguí tranquilo en unos segundos la droga se haría efecto y dejar su cuerpo débil por lo brutal y salvaje del sexo estaría a mi merced, la haría mía cuantas veces quisiera, le enseñaría quien era su dueño, su voz se volvió más grave y fuerte con una sonrisa sádica y victoriosa. - Hasta aquí llegaste maldito hijo de..... -.
No termino su frases cuando su cuerpo empezó a temblar y tambalearse encima de mi, soltó el cuchillo y callo en mi pecho, estaba consiente pero su cuerpo ya no reaccionaria, me levanté y la puse bajo de mi, me la iba a cobrar muy caro, cosa que me pondría mas malvado, cruel y abusivo con ella.