Dos Almas Oscuros

Mi amante.

Su mirada era intensa qué apretó los puños con furia, se miraba tenso como si estuviera por perder la paciencia pero no me doblegue ante su mirada al contrario mantuve la cabeza en alto.

-¿Me estas contradiciendo a mi.... El señor de esta casa? - No me quito la mirada aun que su voz era un poco calmada pero desafiante.

-Y yo soy la señora.... Yo también puedo dar ordenes..... Además tu dijiste que podia perdí lo que quisiera a la servidumbre.... Y sobre todo tu la enviaste para que yo estuviera cómoda -

-¡Si! ... Pero como señor de esta casa tengo derecho a saber que es lo mandas a decir a ese hombre.... ¿Acaso es tu amante?... -

En que momento tuve un amante, si apenas esta recorriendo la casa y conociendo el alrededor, este hombre me sorprendía más con cada estupidez qué salía por su boca.

-A ver.... Corazón... Como va ser mi amante si apenas estoy conociendo la mansión y la servidumbre..... No crees que estas siendo un poquito celoso -.

Se cruzo de brazos y me miró con el seño fruncido, parecía niño haciendo berrinche.

-¡¡No!!... Eres mía y debo cuidar lo que es mio..... Nadie tiene derecho a tocarte y mirarte sin mi permiso.... Le sacare los ojos quien se atreva a codiciar o desea a mi mujer o dirigirte la palabra -.

La qué iba a estallar en furia iba ser yo, ya le quería mentar la madre pero la señora tan linda y dulce no se lo merecía, el ojo me temblaba de coraje hasta me puse a imaginar que le aventaba el plato con el vaso con todo y todo pero tenía que fingir un matrimonio feliz y que lo amaba.

-Corazóncito.... Solo le pedí a la servidumbre qué le diga al chef qué me gusto lo que me preparo ahora y que me gustaría que me prepare mis comidas ya que cierta persona cual tengo enfrente es de paladar exigente pero yo no tanto y yo quiero disgustar sus platillos..... Contento -.

-¡¡No!!....ahora resulta que te gusta lo que prepara ese bueno para nada..... ¿Acaso planeas irte con el por su comida? -

Golpee la mesa con ambas manos del coraje que rebotó el plato y el vaso, temblaba de la furia, apretaba los dientes, ya estaba por estallar.

-para eso.... Es el chef.... Para que prepare las malditas comidas cuando se le ordene..... ¡¡Entonces para que malditas madres esta trabajando en esta mansión!! -.

Le avente en plato a la cara, el solo meneo la cabeza hacia un lado sin mover su cuerpo, me quedo viendo en silencio con una expresión neutral por unos minutos , la sirvienta temblaba del miedo y no se atrevía a moverse o alzar la cabeza.

-Tienes razón mi amor..... No me puse a pensar que para eso le p**o a ese incompetente.... Pide lo que tu deseas -. Ahora más que nunca estaba segura que este le falta tornillos, camino hasta mi y se sentó a mi lado como si no hubiera pasado nada cruzadose de pierna.

-¿Y tu que haces ahí parada? ..... Ve por otro plato para la señora y otra bebida inútil... -. La pobre no espero y se esfumó del lugar, después me miró y me sonrió, lo mire con una mueca de desagrado.

-Siéntate...... Ahora traerá tu postre mi amor -. Cuando salía de su boca me producía náusea y ganas de romperle la boca.

-Y ahora que quieres.... Parece que tenias una video llamada urgente y que hasta en la noche terminaba -.

-si..... Pero se tomo un tiempo de media hora.... Quería verte y saber si te gusto tu nuevo hogar... Si ahí algo que no te parece, puedes cambiarlo..... Solo dícelo al mayordomo y el lo solucionará -.

-No... Por el momento todo esta bien..... Me gusta el diseño y la calidad de los muebles y decoraciones.... -

Una de sus manos se deslizó por la mesa dejando cerca mio una tarjeta qué se veía muy llamativa.

-Puedes comprar lo que tu quieras..... Joyas, vestidos, bolsos, zapatos, lo que tu gustes... -

Mis ojos brillaban, no por la tarjeta, bueno si pero era por que me estaba dejando salir de comprar osea salir, ser libre.

-¿Entonces puedo salir de compras?... -

-No..... Dije que podías comprar pero no salir, puedes comprarlo por medio de Internet y listo.... -

Este maldito posesivo de mierda, siempre tenia que salir con sus estupideces, era tan creíble para ser buena, jamás me dejaría salir este psicópata.