Un Ardiente Secreto Laboral.

Christine Mattson.

Nuestra historia se centra en la empresa Soriaxe, en la hermosa ciudad de Zurich.

Personajes principales:

*Christine Mattson es una hermosa joven 24 años de cabellos rubios y preciosos ojos verdes aqua, verlos hacen que

recuerdes las aguas que reflejan el cielo azul en su interior, ella es una chica preciosa, tiene una belleza natural, que a más de

una ponía celosa, su figura era tan espectacular que al conocerla James, el dueño de Soriaxe, una empresa en la que

ella laboraba, el hombre no pudo más que quedar a sus pies.

Bienvenidos y espero disfruten mucho la siguiente novela...

Christine...

Desde que tengo uso de razón he tenido la maravillosa fortuna de tener padres que me aman, mi nombre es Christine Mattson, y esta es mi historia.

Desde que recuerdo siempre pasaba las tardes en el restaurant de mi padre, las personas en esta zona nos conocen muy bien, mis padres Christof y Sandra, son los mas ambles seres humanos del mundo, las personas de la zona son tan amables, pues mis padres ayudan como pueden a la comunidad, si algún necesitado llega al restaurant, no dudan en ofrecer un plato de comida, son así, buenos por naturaleza creo yo.

Cuando era niña comencé a ayudar a mis padres, mi padre tomaba las ordenes y mamá y yo hacíamos la magia en la cocina, ella siempre fue muy paciente conmigo, aprendí a cocinar desde muy joven por mi madre, por que ella sabe hacer tantas comidas distintas.

Cuando entre a la Universidad, mi vida cambio de golpe, tuve que irme a la ciudad de Zurich, era muy distinta al pequeño pueblo donde yo había vivido toda mi vida.

La universidad era la mas prestigiosa, por ello era muy complicado ingresar en ella, pero gracias al cielo tengo una fuerte convicción, seguida de buenas notas toda mi vida académica, siempre fui la nerd de la clase, al utilizar anteojos ya se imaginas cuanto apodos me ponían los chicos, siempre iba con ropa cómoda al colegio, jamas me ha interesado utilizar ropas caras, mucho menos sabiendo que mis padres trabajan tan duro para darme todo, nunca les exigiría algo tan pretencioso como una marca de ropa.

Soy desconfiada por situaciones de la vida, cuando estaba a punto de concluir mi carrera un joven se comenzó a acercar a mi, venia casi al diario en el desayuno para charlar conmigo, era extraño, el era famoso por ser el mejor jugador de Americano de la Universidad, era apuesto, rubio, ojos color miel, proveniente de una buena familia, si no por decir adinerada de mas.

Un día le pregunte por que lo hacia, por que me buscaba, quede atónita cuando me dijo que yo le interesaba, que estaba arto de las chicas materiales, que yo parecía sincera, dulce, amable, cuando lo escuche decir tantas cosas lindas de mi fue como, Wow, este sujeto si que esta enamorado de mi, pero no comprendía el por que, si claro soy gentil, y todo eso, pero... No era bonita, no al menos a la vista de la mayoría, el y yo comenzamos a salir, no había nada serio aun, en una ocacion me invito a un concierto de rock, yo estaba tan emocionada, llame a mi madre, le conté toda la historia, ella me dijo que utilizara la tarjeta de crédito que me habían dado, que comprara ropa para lucir increíble, yo lo dude, pero al final acepte, no muchas ocaciones puedo ir a un caro concierto, así que lo hice, fui al centro comercial, al ver el precio de las prendas estuve a punto de arrepentirme, pero al final lo hice, compre una falda de piel negra, una chaqueta que le quedaba perfecta, una camiseta del grupo al que íbamos a ir a escuchar, en fin, termine de arreglarme exactamente a las 8 de la noche, me había arreglado el cabello, me hice un maquillaje que me encanto, al verme en el espejo de cuerpo completo me agradaba lo que veía, era increíble como unas prendas de ropa y unos pocos arreglos cambian a una persona, deje mis lentes en casa, pues no quería hechar a perder el outfit que había preparado, podía ver, pero mi vista se cansaba rápidamente, aun así no dejaría que eso estropeara la noche.

- Buenas noches Robert...

Le digo al abrir la puerta, el me observa de pies a cabeza muy asombrado, parece que le agrada lo que ve, así que me siento mejor, creí que quizá seria demasiado, pero no, el sonríe y me dice palabras tan lindas que hacen mi corazón latir con mucha fuerza.

- Wow, te vez.. increíble, estas hermosa esta noche Christine.

- Gracias.

- Bien, vayámonos, su carruaje espera mi Lady.

El es un caballero, escuche muchos comentarios sumamente ofensivos sobre el, que solo era un niño bonito que no le interesaba nadie en realidad, pero siento dentro de mi corazón que es sincero cuando habla conmigo, el dice que conmigo se siente tan relajado al hablar, que yo no soy como los demás, que lo juzgan, que siempre esperan algo de el, que conmigo puede ser libre, y me alegro, creo que nadie tendría por que fingir una vida que lo incomoda, pero el me ha contado que sus padres esperan que el se case con tal persona, que saque las mejores notas siempre, que sea el mejor jugador, pero el desearía solo ser libre, lo ayude hace algunos días con un trabajo de uno de los maestros mas complicados que tenemos, el estaba hecho rizas, tan agobiado, así que me ofrecí a ayudarlo, el se negó, pero al final lo hice por el, fue una sorpresa, el me agradeció mucho, pues aun cuando paso la noche en vela le había sido imposible terminarlo, yo tengo tiempo, y gracias al cielo estoy al día con todo, así que puedo ayudarlo cuando lo necesite.

Cuando subimos a su auto me doy cuenta que lleva uno nuevo, no es el que suele usar en la universidad, me cuenta que su padre se lo obsequio, que hizo un buen trato con una nueva empresa que adquirió y pudo darles obsequios a el y a su madre.

Me sentí muy feliz por el, parece ser un buen hijo, debe serlo, para que su padre le compre un auto del año.

Cuando llegamos al concierto llamo a mi madre antes de ingresar, le digo lo que me pidió, a donde iba, con quien, por si algo me sucedía, ellos se preocupan mucho por mi, siempre, creo que no dormirán hasta que regrese a casa.

Entramos y el lugar esta a reventar de personas, el grupo aun no ha hecho acto de presencia, tomamos nuestros lugares, que son VIP, frente a donde el grupo va tocar.

- Deben haberte constado una fortuna...

Le digo al tiempo que sonríe.

- La verdad fueron un regalo de mamá, hace un mes cumplí años, ella me los compro en linea y ahora aqui estamos.

- Vaya, mis padres jamas podrían gastar una suma como la que supongo utilizo tu mamá.

- Bueno, no todos los padres quieren igual a sus hijos.

Ese comentario no fue muy de mi agrado, pero quizá solo lo dice por que sus padres tienen tanto dinero que les dan todo a el y a su hermana, quien es mayor que el.

El concierto comienza, la música es tan fuerte que mi corazón siente cada bum de la batería, es tan divertido, todos corean las canciones, gritan a los integrantes, Robert me tiende una bebida, es una cerveza, la realidad es que no me gusta mucho, no bebo, solo algo de vino en la cena navideña, así que la cerveza es algo nuevo para mi, aun así la acepto, le doy unos pocos sorbos, pero no logro pasarla.

El me dice que beba con confianza, que pedirá mas, pero me niego, le digo que no me agrada el sabor.

- Quieres algo mas, diviértete, anda.

- Me estoy divirtiendo, de verdad, no necesito alcohl.

Su rostro parece ahora mismo molesto, el se queda serio, intento beberla, pero no me gusta el sabor.

- Necesito ir al sanitario, ahora regreso.

Le digo, el me observa y solo asiente, creo que le ha molestado que no beba, pero, no lo necesito, la estoy pasando bien.

Hago una larga fila, cuando por fin entro siento un gran alivio, camino de nuevo a nuestro lugar, veo que el esta hablando con alguien, extraño, si aqui casi no se logra escuchar, tendrá que gritar muy fuerte, y así lo hace.

- Es una pesada, no quiere beber, como piensas que voy a llevarla a la cama si no esta ebria, es una mojigata, ya lo sabes, sus principios, quien hoy en día cuida su virginidad, es toda una nerd en todos los sentidos, gracias al cielo que se traga el cuento de que no puedo aprender, la usare para hacer mis trabajos, ademas, es mas bonita de lo que pensé, llevarla a la cama sera un premio extra...

Cuando lo escucho hablar así mi mundo se derrumba, el, solo buscaba eso, tener a una tonta que lo ayudase con las tareas de la Universidad, pero al parecer no es solo eso.

- Oye amigo, la apuesta eran 5 grandes por llevármela a la cama, así que aun no cantes victoria, caerá tarde o temprano.

Así que soy solo una apuesta, solo soy un premio, llevarme a la cama, solo por una estúpida apuesta, maldición, que imbécil he sido, claro, como iba a pensar que el me iba buscar por que yo le atraía, si jamas me arreglo para la universidad, quería tener una tonta que le hiciera las tareas que el no deseaba hacer por andar de fiesta, que ilusa has sido Christine, como pudiste pensar que de todas esas jóvenes que son de una buena familia, hermosas, que llevan al menos miles de dolares en cirugías en sus pechos, su trasero, sus rostros, que te iba hacer caso a ti, soy la tonta pueblerina de la que el decidió burlarse.

Me doy la vuelta y me alejo de el, no quiero estar mas aqui, siento tanta vergüenza por haber caído en sus manos, por pensar que de verdad por sobre todas mis compañeras el me había elegido a mi, que tonta he sido, no cabe duda que mi cerebro solo funciona lógicamente para las matemáticas y no para la vida.

Camino tan rápido como puedo hacerlo, casi corriendo, la lluvia comienza a caer, solo eso me faltaba, camino fuera de este lugar, mi móvil suena, es el, es Robert, no le atiendo, busco un auto para ir a casa, veo el amarillo y se que un taxi se acerca, le hago la señal y se detiene, al abrir la puerta algo, o mas bien alguien la cierra.

- Tenga, gracias por su servicio.

Robert le tiende 100 dolares al hombre que feliz se aleja.

- No espere!!

Le digo pero el hombre arranca.

- Lo siento Christine, no te vayas, mira, lo que dije, no es verdad, si no quieres beber no lo hagas, yo solo quería que tu te divirtieras, solo eso...

Lo observo a los ojos, estoy furiosa, pero al mismo tiempo tengo deseos de llorar, el se ha burlado de mi, fui tan ingenua, como se ha reído de mi, y ahora, ahora parece sincero, es un buen actor.

Sin pensarlo o poder evitarlo le doy una bofetada.

- Solo fui eso para ti?

Una apuesta?

El abre muy grandes los ojos, toca su mejilla, sabe que lo descubrí, aun así intenta negarlo claro, no le conviene perder a la tonta que le ayudaría con la Universidad.

- Que? pero como puedes pensar eso de mi, pensé que eramos amigos, e sido sincero contigo Christine, creo que he sido un buen amigo, yo...

No puedo creer que ahora se haga la victima, que intente hacerme sentir mal, veo quien es, un malvado vestido de oveja.

- Sabes, confié en ti, creo ciegamente tus palabras aun cuando me dijeron cosas de ti, yo no lo creí, por que confiaba en que quizá era verdad, te tenían envidia, ahora me doy cuenta que no es así, te escuche hablando por el móvil, le dijiste a quien sea con quien hablabas que solo era una apuesta, y el premio seria llevarme a la cama, que yo haría lo que tu me pidieras, y quizá habría sido así, sabes por que?

Por que soy confiada, por que como mis padres me enseñaron, confío en las personas, me han lastimado, pero siempre perdono, pero jamas a este nivel, a querer llevarme a la cama solo por diversión, quien te crees, que por tener dinero puedes hacer lo que desees, de verdad? Crees que eres mejor que todo el mundo, yo no tengo quizá lo que tu, pero a mi me educaron para ser un buen ser humano, para ayudar a los demás, no para lastimar, si lo que tienes solo sirve para eso, para hacer daño, mejor no lo quiero, no lo deseo, prefiero seguir siendo como soy, feliz con poco.

El ahora parece furioso por lo que acabo de decirle, me toma del brazo y me lleva hacia los estacionamientos, le digo que me suelte, que me deje, pero no le interesa lo que digo, sigue casi arrastrándome, un hombre que es de seguridad del lugar lo detiene.

- Alto ahi, suéltala, que sucede contigo, estas ebrio muchacho? Esta usted bien señorita.

Yo sumamente asustada, pues pensé que el iba hacerme daño me cuelgo del brazo del hombre y le pido que me ayude.

- Ayúdeme, quiero ir a casa, no quiero ir con el...

El parece de la edad de mi padre, me dice que si hay algún numero al que pueda llamar, y la realidad es que el miedo que siento ahora me hace buscar a las personas que se siempre están para mi.

- Esta bien, quédate con este hombre, no eres tan bonita para tener problemas por ti...

Me dice de manera hiriente, pero va listo si cree que se va, pues el hombre que me ha salvado de sus manos le dice que no puede irse.

- Que? y usted me lo va impedir?

Dice Robert sonriendo, pensando que nadie tiene el poder de hacer que se quede ahi.

- Marcel adelante!

Dice el hombre por el radio.

- Un joven esta aqui conmigo, puedes verlo por las cámaras?

- Afirmativo John, que sucede.

- Ataco a una joven, llama a la policía, los padres de la joven ya fueron alertados, están en un pueblo a dos horas, pero ya vienen hacia aqui.

Robert abre muy grandes los ojos y asombrado dice que me arrepentiré si digo algo malo sobre el.

- Te aseguro que va pesarte si dices algo.

- Guarda silencio, no hables con ella, solo hablaras conmigo.

Me siento tan feliz por haber encontrado a este buen hombre que cuida de mi.

- Esto es increíble, no le hice nada, solo quería llevarla a casa.

- De verdad?

Le dice el hombre a Robert.

- Mira su brazo, esta rojo, esto se hará un moretón, tu no puedes obligar a alguien a subir a tu auto, eso mi querido joven, eso se llama secuestro.

Nos quedamos ahi, esperando a que llegue la policía, cuando lo hacen dos abogados llegan a lado de Robert, sus padres, y todos me ven de manera furiosa, yo estoy solo con la compañía de este guardia de seguridad, que me dice no se separara de mi hasta que mis padres lleguen.

Nos llevan a la jefatura, y una vez alla toman mi declaración, ya tengo un abogado asignado, y tan como el buen John lo dijo, no se separo de mi, yo le cuento todo lo que sucedió, el me dice que debo tener cuidado, pues las personas suelen aprovecharse de jóvenes como yo, confiadas, y veo que tiene razón, escucho tras de mi un grito, mi madre y papá han llegado, los ojos de mi madre tan rojos, debió estar muy preocupada, ella me abraza al igual que papá y me preguntan que sucedió.

Les cuento todo, y que el buen hombre que esta ahi a mi lado me ayudo, mis padres le dan la mano y dicen que jamas podrán pagarle por lo que hizo, le ofrecen dinero, pero John se niega.

- No es necesario, tengo una hija, se cuanto amor se siente por ellas, solo cuiden de ella.

Esa fue la razón por la cual desconfío de las personas, gracias al cielo el trato al que mi familia llego con la de Robert fue que el no volvería a hacerse a mi, tanto que lo enviaron lejos a estudiar, tranquilamente concluí mis estudios, diseño gráfico y empresariales ,al menos mi cabeza me había dado la maravillosa fortuna de hacer dos carreras con mucho esfuerzo, mis padres venían los fines de semana a quedarse conmigo, había sido un gran trauma, me llamaban a cada momento del día, preocupados, pero todo salio bien.

Estaba lista ya para comenzar a buscar empleo, quería llegar muy lejos, y seria la mejor en mi ramo.