—¡Milady! ¡Milady! ¡Princesa de Alistair! —Llama Meredith buscando a Esther por los jardines sin resultados positivos — Por los dioses… el rey me matará… —murmura Meredith porque llevaba quizás una hora buscando ala reina y no lograba encontrarla.
Ella ya estaba comenzando a preocuparse, porque si la princesa vampira había escapado, la primera que ejecutarían sería a ella porque estaba a cargo de su cuidado, y de tan solo imaginarlo, Meredith se llenaba de miedo, pero a pesar de todo, la muchacha todavía no había hecho de la desaparición de la reina un escándalo, porque no quería alarmar a todo el castillo y causar un revuelto.
—Debo buscar ayuda… ¡Ya sé!, le diré al lord Calen que me ayude, él es de confianza y se lleva bien con la reina, además es un alfa, su olfato es mejor que el mío
