Haciendo una mueca por el impacto, Charlotte levantó la cabeza y encontró a Erian congelado ante ella, su rostro tallado en piedra, con la plata brillando en sus ojos. Sus propios ojos se ampliaron y se encontró conteniendo la respiración mientras ella miraba hacia él ¿Le había hecho daño? Sentía que la situación se habia tornado de alguna manera muy peligrosa para ella, aunque no sabría decir por qué, luego Erian bajo su cabeza como si se tratara de un Halcón al ver a su presa, su boca cubrió la de ella en un suspiro. La necesidad se vertió dentro de él y su deseo quedo en evidencia con ese beso
De alguna manera no era igual a como habia sido en la mañana, ese beso había sido dominante y seductor, este era salvaje y fuera de control, una explosión de desesperada necesidad, que casi le da
