Principio de otoño y la citatoria se dio cita en una sala del Distrito Nacional. Esta vez Guillermo Villalona si se había dado cita en la cita impuesta de otoño y la citatoria se dio cita en una sala del Distrito Nacional. Esta vez Guillermo Villalona si se había dado cita en la cita impuesta para la demanda, no porque se le haya aconsejado su buen amigo Ricardo Germosén, sino porque quería ver qué era lo que traía en manos su querida esposa Carolina Sosa, a quien amaba con locura, pero que ella se había alejado de él, sabría Dios a qué se debería.
El abogado Castellanos era quien acompañaba a la señora Sosa de Villalona para su primera audiencia, compañía que puso nervioso a Germosén, pues éste sabía por propia experiencia quien era ese ilustre doctor en leyes, muy conocido entre los del
