La mañana del martes siguiente, fue bastante... Entretenida. Primero pasé unos veinte minutos persiguiendo a Deck que se había puesto todas mis camisas y corría de un lado a otro del apartamento. Yo estaba envuelta con la toalla mientras él bailaba sobre la mesa meneando su trasero en mi cara, Nolan nos seguía intentando ayudarme pero pude notar que realmente no se estaba esforzando, el ángel disfrutaba de eso tanto como el demonio. Cuando por fin lo alcancé, y solo porque se tropezó con uno de mis zapatos y cayó al suelo el tiempo suficiente para montarme sobre él y quitarle una camisa a la fuerza, mientras él mordió el cuello de esta en un intento de impedir que se la quitara, pero hice presión sobre su mandíbula hasta que lo obligué a abrir la boca. Me levanté y fui a vestirme mientr