La alarma sonó más temprano de lo que pensé, no me acordé anoche de ponerla la hora correcta, eran las cinco de la mañana y el sueño se me había ido por completo, desde hace días tenía cierta inquietud, hoy después de tantos años, soñé con él, como me maltrataba y no le importaba en lo más mínimo si acababa con mi vida, estaba sudando y mi corazón parecía que se iba a salir del pecho, tenía miedo, no quería volver a verlo y menos que llegara a encontrarme porque sabía de lo que era capaz de hacerme.
Baje a la cocina por un vaso de agua, me senté en una de las sillas y solo trate de calmarme, no puedo seguir teniendo miedo de él, ya no soy una niña, puedo defenderme sola, debo aprender a ser fuerte, me quedo pensando hasta que veo a través de la ventana como sale el sol, siento unos pasos
