Punto de vista de Axel
—Juega bien— Ella había advertido antes de salir de la habitación, con las llaves del auto colgando de su dedo índice, dejándolos hablar.
Jugar bien no sería exactamente el término que alguien usaría para describir la atmósfera en la tienda de Axel. Tal vez, casi hostil sería mucho más apropiado.
Sonrisas torcidas adornaban los rostros de ambos hombres mientras se examinaban mutuamente.
—¿Con quién has estado trabajando?— preguntó el italiano, levantando una ceja desinteresada hacia Axel. Habían pasado un par de horas desde que ella se había ido a la clase de Cassiel y los animales no habían hecho más que discutir y comparar qué logros eran mejores y quién podría ser más intimidante.
La habría agotado, sobre todo porque sabía lo que se escondía detrás de la fach
