—Si puedes adelantante, por favor —le pidió Altair a Lorena—. Necesito resolver algo.
Pese a la manifiesta necesidad de Altair de quedarse sola con Leroy, Lorena no le prestaba la atención que reclamaba. Estaba extasiada mirando a Leroy, quien fue consciente de la reacción de la chica, pero como hacía años estaba curado de las tentaciones gracias a al poder de Akais sobre él, la ignoró y decidió poner su atención en Altair, la razón por al que estaba allí en lugar de haberse ido a la casa que Ales arrendó y disfrutar al lado de su pequeña familia.
—Lorena, deja de ser tan imprudente —le reclamó Altair al darse cuenta que no disimulaba observar a Leroy con interés. En seguida recordó a Akais. Siendo como es recelosa y protectora de las relaciones respetuosas, y de su familia, en seguida
