Me despierto y me siento sobre la cama, me levanto y tomo una ducha en unos pocos minutos, me visto con un blu jeans y una camiseta, es mi look más sencillo, pero no es la ocasión para ser el centro de atención, me aplico un brillo en mis labios y miró hacia atrás, noto que Louis está sentado sobre la cama mirándome, fijo mis ojos sobre él y le habló. —¡Cómo amaneció mi esposo! —Le sonrió, mientras Louis me observa sin expresar nada. —¿Para dónde vas? —él me pregunta de la manera más distante, no entiendo cómo me puede hablar de esa forma si hace unas horas solo me repetía que me amaba, y ahora parezco una simple conocida. —Al consultorio, sabes que todos los días voy ¿Te sucede algo? —le terminó de hablar a Louis y me miró en el tocador. —No, simplemente que jamás te había visto tan