Eric Sentir su respiración tan cerca de la mía me hace confundirme aún más, sus labios aunque no los he probado, me hacen ver qué es el bocado que nunca quiero terminar, mi mente me trata de decir qué la caballerosidad es lo que manda y lo más valioso para conquistar a una mujer, pero sí aprovechó esta oportunidad y la beso, quizás me odie es un riesgo que debo tomar, pero puede ser que ella se sienta a gusto, y lo que más esperaría sería que ella también desee besarme, mi frente gotea sudor y ella sonríe, rozamos nuestros labios y los unimos, besándonos y haciéndome volar, hasta sentirme completamente enamorado, ella agacha su cabeza y me confunde un poco, no sé qué quiere decir eso, más probable es que sea arrepentimiento. —¿Así de mal estuvo? —hablo mientras mis ojos no pueden parar