CAPITULO 11
NARRA PIERCE CORREA
¡Este era el puto Infierno! ¡Deshonra! ¡Mierda!
Todas las posibles palabrotas rodean mi mente, ¿Andrea está pensando que puede salir como lo solía hacer en Miami? ¡Qué carajo! Ella quiere volverme loco, ¡eso es todo lo que sabe hacer!
Cuando escuché el rugido del motor del auto me estremecí, le grité a Katrina para que ella se fuera, ni siquiera la invité, pero no soy un puto hierro, la mujer aparece en mi habitación en lencería diminuta y sensual ¿y qué voy a hacer? No me voy a quedar solo mirándola si la puedo disfrutar.
Las mujeres parecen haber hecho un complot contra mí, eso es todo, quieren mi fin, mi cabeza, pero no sé cuál.
Inmediatamente llamo a Israel y Luca y les digo que vayan tras ella, no puede salir con mi coche, especialmente si va a te
