Derek Collins Ese viernes por la mañana, había tomado el día libre para estar totalmente disponible para lo que íbamos a hacer. Kathy estaba durmiendo en el asiento de copiloto, la noche anterior se había quedado dormir en mi casa pues desde que lo hicimos la primera vez Kathy ha estado pidiendo mas y mas. Era como si hubiera tomado por primera vez un caramelo y se volviera adicta. Poco a poco me daba cuenta que a pesar de que parecíamos tan diferente, ella y yo éramos similares en algunas cosas. Además, ella me había relatado que mientras mas relajada la dejaba su cabeza dolía menos y podia tener la capacidad de bloquear los colores por un tiempo si ella se concentraba. Me gustaba sentir que de algún modo le estaba ayudando. Al final termine pidiéndole a Kathy ser mi pareja formantemente