-Mira no creo que deba aclarar que no está bien que estemos solos, yo soy una mujer casada - afirma sintiéndose cada vez más nerviosa. -Ana por favor - se encuentra a sí misma haciendo algo que no es usual en él. -Por favor nada, tu dijiste que mi hijo es un bastardo y que no es tuyo, Julian lo quiere y acepta - empieza a hablar sintiendo su corazón acelerado pues es la primera vez en días que están juntos y tan cerca. -Pero su padre soy yo - se siente cada vez más desesperado al ver su hostilidad. -Pero él es mi esposo, y mi deber es estar a su lado - afirma una vez más intentando terminar la conversación lo antes posible y así volver a su lugar seguro. -Pues divorciate y casémonos como era nuestro plan, mi madre ha estado viendo detalles para nuestra boda, además si quieres ella te