El mismo día New York Mustafá Logramos sobrevivir a una prueba más, pero no significa que estuve tranquilo en el vuelo, todo lo opuesto, porque el tiempo se termino y era evidente pensar en lo que vendrá, incluso no podía despegar mis ojos de Alessia buscando alguna señal de esperanza en su mirada, aunque la contemplaba y estaba la pregunta constante, ¿Vencí sus miedos? ¿Será capaz de apostar por nosotros? No tengo la respuesta, solo un mar de dudas, pues los pocos días juntos han sido caóticos, llenos de amor, de peleas, de situaciones peculiares, entonces es inevitable estar aterrado por perderla. En fin, apenas aterrizó el avión en una pista privada del aeropuerto de New York, nos estaban esperando dos autos para evitar más sorpresas, uno llevaría a Julius a donde quisiera, y al