—¿Cómo estás tan segura de eso?
—Conozco a Candy y esto nunca le había pasado, por ello sé que seguro esta vez lo hará, además, tampoco respeto lo que le dijo. Otra razón más es que pagara por algo que no hizo. Melania, quédate aquí, así no puedes volver, además, allá dentro hay mucho bullicio por tu presencia, por mi parte debo regresar al trabajo, sino Geovanny volverá por mí —dicho esto se retiró y al salir aseguro la puerta.
Esa noche desde mi parecer había sido tan larga que quede dormida sin darme cuenta, sin embargo, repentinamente el sonido de algunos gritos me hicieron despertar sobresaltada.
Vi que todas las chicas estaban en la bodega, unas muy alarmadas y otras llorando, pero la que gritaba era Susy, quien se encontraba tendida en el piso, adolorida y sangrando, a su la
