Alex Se fue rápido y maldiciendo. Ver su sostén blanco y un poco de su pecho hizo que me ponga duro como una roca. Estoy malditamente seguro que los tiene mas grandes y estoy malditamente conteniendome de agarrarla y besarla como ayer. Desperté del trance que tenia por ver sus hermosos y perfectos pechos y corrí hacia ella. Ella estaba tan enojada que no se dio cuenta de mi presencia detrás de ella —¿Quien se cree que es...? —Iba diciendo mientras trataba de planchar su camisa con sus manos. Me reí y puse mi mano en su muñeca para darle la vuelta. Ella sorprendida callo arriba de mi se apartó de un empujón al instante Tranquilamente disimule el dolor que ocasionó su rechazo en mi corazón Tome el papel de mi bolsillo y se lo di. —¿Que es eso? —Pregunto enseguida con un ceño frunci