—Podría intentar esconderme.— Sonríe, moviendo su cabeza. —Te encontraría en cualquier lugar.— Murmura en su cabello, dejando un beso sobre este. —Siempre.— Asegura pensativo. Comienza a jugar con la palma de la mano de la castaña, quién no se niega a este tacto. —Es tarde, tenes que descansar.— Agrega trayendo hacía arriba las mantas, para acurrucar a Adela su pecho rodeándola por la espalda. —Yo te cuido.— Promete antes de que ella deje sus parpados caer. ~>`)~~~~>`)~~~~>`)~~~~>`)~~~ —¿Ya vas a dormir al fin?— Gio se hace presente con un termo de café bajo su brazo, Theo asiente con la cabeza apagando las computadoras. —Ya deje todo organizado para mañana.— Señala, palmeando sus propias palmas. —¿Estás bien?— Muerde su labio inferior. Theo realmente tiene muy mal