Las Sombras de los Recuerdos Pricionero de la Oscuridad

La Conversación que Da Esperanza

 Episodio 7

La corriente que había en mi pensamiento sobre regresar o no con White era tan grande que en momento muy desafortunados sentía ahogarme en ese maldito sentimiento de necesidad de querer estar con ella y a la vez no.

Probablemente era un loco sin sentido o una persona desequilibrada por no tener firmes mis pensamientos y los sentimientos, pero lo único que deseaba era estar en paz con esa maldita sed de amor y esperanza.

Siempre fui el culpable de mis decisiones y de las relaciones que de una u otra forma siempre lograba encontrar por ahí, y que al final del día era yo quien terminaba entregando todo a cambio de nada.

Con la relación de Dalia me había dado cuenta que al final de ese día lo único bueno que había sucedido era que había logrado hacer que ella sacara a la luz la persona que en verdad era o la persona que en verdad ella quería ser a lo largo de su vida.

Por lo que si se tomaba de una forma positiva había logrado ayudar a un alma ser liberada o liberarse de sus ataduras internas y que pudiera ser libre de alguna manera posible.

Ahora pensando en que hacer por mi vida, tenía algo de frente y debía confrontar mi decisión de haber llamado a White para conversar con ella en un lugar completamente neutral.

Pero de igual forma había sido una forma errática de mi parte darle a entender que si estaba dispuesto a regresar con ella y sinceramente era lo último que debí haber hecho en esa ocasión.

Sabía en el fondo que me debía una oportunidad principalmente conmigo y con nadie más y que debía de aprovechar estar solo y disfrutar un poco o mucho la soltería a la que estaba entrando a mis 23 años aun.

Después de tantos años más adelante, no pude llegar a entender ¿Cuál era mi urgencia por querer amarrarme con alguien? Y más sabiendo cómo era en este caso White, por lo que sinceramente llegue a considerar que de alguna manera y sin haberlo pensado de esa forma, el haber vivido con padres separados y a pesar que ellos de una u otra forma siempre me brindaron apoyo, amor y co0mprencion; mi interior siempre estuvo completamente vacío y solo buscaba el querer sentirme acompañado de alguien.

Pues mi Padre trabajaba todo el día y fue con quien en realidad viví mas años que con mi Madre, pues con mi Madre solo iba de visita en vacaciones o en muchos días al año y ¿Quizás? Eso fue lo que sin darme cuenta me hizo falta desde pequeño, la atención y el querer o necesitar a una persona a mi lado el mayor tiempo del día.

Todo fue porque siempre debía de prepararme la comida cuando mi Padre no estaba en casa y eso era casi que a diario.

Mis tareas del colegio, realmente no tenía quien me ayudara o siquiera preguntara como me iba en el colegio a no ser que llegara el día de la entrega de notas y entonces si tenía todas las miradas alrededor de mí.

A pesar que mi Padre tenía quien ayudara en casa con la limpieza y otras tareas no me gustaba que me preparan la comida, nunca fui partidario de que otra persona manipulara mis alimentos.

Por esa razón es que me preparaba la comida por mi cuenta y por esa misma razón también llegue a estudiar cocina.

Entonces ahí estaban las razones por las cuales desde los 13 o 14 años comenzaba a buscar quien estuviera a mi lado mi razonamiento era diferente a la de cualquier chico de mi edad y siempre me consideraba muy cuerdo en mis decisiones y conversaciones pero lamentablemente desde que entre en la relación con la Loba mi vida dio un giro inverso y deje de ser la persona que había sido desde pequeño hundiéndome en mis malas decisiones y sentimientos erróneos que al final solo me estaban llevando a ser un prisionero de una oscuridad de la cual nunca pensé que pudiera llegar a ser tan densa y absorbente.

Ahora estaba al borde del desastroso futuro que me tenía preparado cupido con el destino.

Mientras eso sucedía y me ataba directamente con White intentaría buscar algo de diversión, algo que me causara distracción y me hiciera olvidar así fuese un poco a Dalia que bien o mal, había dejado huella en mí, no tanto como para decir que me estaba deshaciendo sin ella, pero el haber pasado momento muy agradables a su lado era sin duda una perdida dolorosa en mi vida.

En cuanto a lo de la Lucha Libre, ya no era como tal me aparte de ese mundo ya que a pesar que si me apasionaba por eso, definitivamente el hecho de pensar y sentir que no iba a ver alguien ahí viéndome, alguien que yo pudiera pensar que me motivaba a hacerlo la deje por completo y quería buscar algún tipo de emprendimiento para dedicarme a eso y así no tener que seguir dependiendo de White en lo absoluto para que en ningún momento ella tuviese en su pensamiento el que algún día se cobraría lo que me daba.

Había algo que en verdad me llamaba la atención para comenzar algún tipo de negocio, pero ya había probado en cuanto las redes de internet y seguridad informática y por lo viejos recuerdos simplemente descarte es opción.

La cocina por su parte era otro negocio que quedaba completamente descartado de mi vida por lo acontecido con White cuando habíamos compartido el negocio y la vida.

Por lo que me quedaba decidirme más que todo en un lugar de diversión para adolescentes, a eso me refería en cuanto a montar un salón de videojuegos, de consolas y máquinas de juego multijugador.

Solo tenía un pequeño inconveniente en mi vida y ese era que White se iba a querer involucrar en eso y no tenía ni el más mínimo deseo que ella lo supiera, por lo que antes de hacerlo de esa manera decidí consultarlo con un viejo amigo y así ¿Quizás? Me podría llevar el control del negocio mientras yo andaba de perro solitario por ahí conociendo personas o simplemente saliendo con White.

Algo que definitivamente había cambiado en mi completamente era el hecho que dentro de mí no quería volver a confiar en nadie y no porque en todo caso yo anduviera haciendo lo mismo, sino más bien por el hecho que me según mi forma de pensar me estaba auto protegiendo de los ataques al corazón que siempre sufría en las relaciones por lo que volver a confiar al cien por ciento en una persona o en White ya no era una opción.

De momento sabía que tenía que verme con White y el momento desafortunado comenzaría a partir de esa conversación.

Al dejar pasar unos días después de terminar con Dalia hice la tan ansiada llamada que de seguro había estado esperando con ansias y desesperación.

-¿Cómo estás? Quería saber si puedes llegar al centro ahí por donde tenía mi primer negocio, ¿Si te recuerdas verdad?-

-¿Cómo olvidarlo? ¡Acaso no te recuerdas que por ese tu negocio esa mujer te llego a buscar y fue cuando perdí a nuestros bebes!-

-¡Si lo sé perfectamente! Pero no tenías por qué sacar a recordar ese momento tan agrio en la vida, pero de igual manera te voy a esperar en el restaurante que está a la vuelta de ahí, ¡Por favor no llegues tarde!-

-¡Ahí estaré sin falta, no te hare esperar!-

Según ella no hacerme esperar era igual a hacerme esperar casi dos horas de atraso, la verdad estaba decepcionado de esa situación y de la manera en la que le gustaba jugar conmigo.

Como ella sabía que siempre la iba a esperar, era por eso que siempre me hacía lo mismo, para entonces si tenía paciencia aun, y trataba la manera de calmarme y tener la paciencia considerada, pero llego un día en la vida con ella que la paciencia se fue para nunca volver.

Afortunadamente no había querido ingresar al restaurante a esperarla como bruto sentado en una mesa vacía.

Ese era otro factor en mi vida, ¡Mucha necesidad de comer o alimentarme podía tener! Pero si debía de hacerlo solo en la calle, definitivamente esperaba a llegar a casa a hacerlo, pero si era en compañía así fuese de una sola persona entonces si era de mi agrado hacerlo.

Consideraba que al haber pasado mucho tiempo en soledad y seguir haciendo lo mismo delante de las personas pues no era muy agradable desde mi punto de vista.

Como no quería seguir esperando, me vi en la obligación de llamarle con la certeza que de seguro ella me iba a inventar cualquier pretexto para llegarme más tarde aun, pero si no me daba una respuesta en concreto estaba dispuesto a irme de ahí y no regresar después por ella.

-¿Ya vienes? Porque la verdad ya me desespere y me choca que las personas se me queden viendo que ya llevo más de dos horas esperándote-

-¡Perdóname! Lo que sucede es que no lograba conseguir un taxi y hasta ahorita logre encontrar uno y ya vamos por el tráfico pesado que existe pero estoy aproximadamente a una media hora-

-Te daré una hora si no vienes me voy definitivamente y no creo que exista otra oportunidad-

Algo me decía por dentro que ella a pesar que si llegaría no era como precisamente me lo estaba diciendo.

Para mi desgracia ella seguía teniendo esa maldita traición de conseguirse taxistas que no lo hacía porque no le cobraran el tiempo del viaje, lo hacía porque se le hacía fácil conquistar a cualquier hombre y que cayeran con ella y así siempre andar de arriba y abajo con cualquiera.

Es cierto que de alguna manera yo era la excepción, por el hecho que en lugar de darle desde que nos separamos, era ella la que me daba, pero eso me estaba saliendo más caro que la misma vida.

De igual forma aunque existía ese presentimiento dentro de mí, no lo veía como tal y tuve que esperarla una hora y media hasta el momento que le dio por aparecerse, de seguro antes de llegar conmigo se había ido a revolcar con la persona que la había llegado, pues a lo lejos me pude percatar que no se había despedido del taxista como si fuese un extraño, era más ni me fije en que momento le había pagado, pero de seguro antes del viaje ya le había pagado, pero no precisamente con dinero.

La verdad me sentía muy molesto y antes que darme o darle importancia a ese hecho frente a mis ojos lo primero que hice fue recriminarle por la hora en que había llegado.

-¡Te fijaste en la hora que es ya! Desde hace tres horas y media estoy esperándote, de ser así créeme que no vuelvo a citarte en ningún lugar porque eso de estar esperando a alguien es muy estresante la verdad-

Como me vio muy alterado lo primero que hiso después de darse cuenta que ya no estaba el taxista fue abrazarme y darme un beso ahí medio normal.

Eso que no lo haya hecho antes que el taxista se fuera también era sospechoso, pero de idiota no me estaba dando cuenta de esa situación ¡Nuevamente!

-No cariño, en verdad el tráfico estaba muy pesado y no es que quisiera llegarte tarde, pero en verdad me costó venir hasta aquí, pero lo importante es que ya estoy aquí-

-¡Pero aparte vienes tomada! Como es eso posible que siendo un poco más de medio día y ya andes  tomada, yo creo que ya habíamos hablado al respecto sobre lo de las bebidas y creí que ya no lo hacías-

-Solo fueron tres mi vida, pero te prometo que no lo voy hacer más-

-Solo promesas me das y no cumples una sola promesa-

-Esta vez estoy dispuesta a cambiar por ti, ¡Te lo juro!-

-No jures porque todo se te puede voltear en algún futuro de tu vida-

No supe exactamente cómo es que lo pudo haber tomado, pero de igual manera se lo dije y ella trato de ignorarlo y lo último que hicimos fue entrar por comida.

Desde que nos sentamos a comer hasta que termine no quise hablar nada al respecto, ella veía que a mí no me gustaba los licores ni las fiestas en sí, no es que no lo hiciera pero el hecho de estar ahí enfiestado día y noche eso si me desesperaba y ¿Quizás? Esa es la vida que ella deseaba llevar pero conmigo las cosas eran completamente diferentes.

Siempre disfrutaba estar encerrado en casa viendo televisión o haciendo algo que en verdad me causara satisfacción, pero eso de andar visitando o andar rodeado de persona definitivamente no era ni fue y ni será lo mío.

Al salir de ese lugar y llegar al auto fue en donde comenzó la verdadera conversación.

-¿Tu que pretendes hacer con la vida White? Quiero que entiendas y comprendas que desde un principio, en la vida que tuvimos antes de separarnos, sabias como es que me gusta vivir a mí, no me gusta andar de fiesta en fiesta ni andar en la calle innecesariamente, por lo que si eso es lo que pretendes nuevamente creo que mi decisión va tener que cambiar-

No me respondió al respecto y más bien se echó a llorar, ¿Por qué? Tenía que hacerlo no es que me hiciera daño, pero me perjudicaba el pensamiento verla llorar.

Solo después entendí que era una manera de manipular a su antojo y que por esa razón más que obvia era que lo hacía.

Pero al ver que no le decía más nada, supongo que mejor me respondió y dijo algo que seguramente ella no sentía en lo más profundo de su corazón.

-Mira, quiero que entiendas que si yo he estado así es porque te extraño y me duele verte con alguien más y saber que no quieres regresar conmigo y solo me llamas cuando quieres sexo es lo que me hace sentirme triste y sola y con el alcohol y las fiesta me siento un poco mejor-

La manipulación había comenzado a salir pero no lo vi de esa manera.

-¡Yo te llamo solo para tener sexo! ¿Por qué eres así? Yo no soy el que llama, tu eres la que apareces a veces sin avisar y me llamas diciéndome que vas conmigo y cuando siento pues ya estamos teniendo sexo, pero no digas que solo para eso te quiero-

-¡Ha pero bien que aceptas tener sexo conmigo estando con otra! Y eso me lo tengo que tragar, tú no sabes las veces y noches que paso llorando por ti, pero eso no lo puedes ver-

-No es que no lo vea de esa forma, pero tú tampoco te has puesto a pensar lo mal que me sentí cuando me traicionaste y porque en verdad no me sentía capaz de seguir te pedí que mejor nos separáramos, pero en verdad fue para desahogarme, porque a tu lado no podía y debía sacar, gritar a todo pulmón lo que me habías hecho y ni mi Madre y peor mi Padre saben todo eso, siempre he querido que ellos no me digan que me lo habían advertido.

Es por eso que siempre estuve apartado de ellos y he guardado silencio absoluto en lo que paso entre nosotros-

Cuando mencione que ninguno de mis Padres sabía nada al respecto, le cambio el rostro y supongo que estaba manejando esa información para utilizarla en algún momento a su favor.

A lo que ella respondió secándose las lágrimas.

-Lo único que deseo es que regreses conmigo y que vivas a mi lado, no quiero perderte y no quiero que te vayas con nadie más, todo este tiempo me ha dado duro el estar lejos de ti y me he dado cuenta que solo contigo es con quien quiero y deseo estar, tu eres mi vida y mi amor eterno, ¡Por favor regresa conmigo!-

Sabía de antemano que ella no iba a dejar de insistirme en el tema y de alguna manera era a lo que iba pero antes de tomar mi decisión quería asegurarme que las cosas iban a cambiar en ella.

-¿En verdad estas dispuesta a cambiar por estar conmigo? Porque es el único requisito que pongo de por medio y por si no te has enterado desde hace días que termine con Dalia o más bien ella me dejo por irse con alguien más-

Sus ojos brillaron en ese momento más que a cualquier estrella en el cielo, los ojos le bailaron de la emoción y de la declaración, por lo que tenía todo el camino abierto al respecto.

-¿En verdad terminaste con ella? O ¡me lo dices para darme esperanza y hacerme lo mismo con ella!-

-disculpa que lo diga de esta forma, pero no soy ni parecido a ti, tengo muchas formas de hacer las cosas a mi manera, pero jamás me vas a ver traicionarte o me vas a ver comportándome como tú lo haces y si me acostaba contigo estando con ella, era porque ella sabía que eso pasaba y simplemente no soporto más la situación y tú no es que lo supieras tanto al principio pero igual te daba que estuviera con ella o no-

-¿Entonces quieres decirme que vamos a regresar?-

-Sí y No, porque quiero ver que en verdad has cambiado y si veo un cambio en ti de seguro tomare mi decisión definitiva y hasta pueda ser que me vaya a vivir contigo a tu casa-

Con esa declaración le di todo el poder de controlarme y manipularme a su antojo cuando eso sucediera y de seguro iba a suceder después de no sentirme seguro en donde aún seguía viviendo y de donde ¡Nunca debí haberme salido!

Pues con mi gusto y mi gana Salí a entregarme a la oscuridad total.