—¡HAAAAA!—grito Venecia del dolor mientras la sangre corre por su hombro, pero eso no hizo que Alexander se detenga,
—¡tú piel es tan suave que no es difícil lastimarte—dijo mientras le muerde el cuello y otras parte de su cuerpo,
después de termina Alexander se va al baño y Venecia piensa que todo terminó pero no es así,
—no te duermas esto recién empieza, aún no estoy del todo satisfecho así que haz mejor tú trabajo,
—¡déjame en paz maldito bastardo!—grito Venecia con la voz quebrada y respiración agitada, estaba temblando,
—¡no quiero dejarte!, quiero destruirte por completo, no sirve de nada que llores o supliques,
—¡¡te odio maldito te odio!!—grito Venecia intentando golpear a Alexander pero el la detuve ya que no tiene nada de fuerza,
—¡vamos te voy a bañar estas sucia de
