Al día siguiente, sábado Ámsterdam Desirée Creo que no hay respuestas correctas para sanarte, más bien es un proceso tan propio y tan íntimo, para mí fue un duelo que abrigaba en mi pecho sin opciones a despedidas, ni charlas como se acostumbran cuando te dejan. Lo que dejó mi corazón en carne viva. Sin embargo, enloquecí, estoy aventurándome con todos los miedos, con todo lo que significa dejar entrar a alguien en mi vida. Sí, es una apuesta arriesgada, pero siento que encajo con Julius, va más allá del sexo lo que estamos construyendo, me ha devuelto las ganas de vivir, con sus miradas intensas, con sus sonrisas traviesas y con esa forma tan especial de acariciar mi alma. Aunque era una necesidad conocer todo de él, tener el control para sentirme segura a su lado. Reconozco que es