41. ¿El comienzo de nuestra felicidad?
Franco
El vuelo de regreso es totalmente diferente al de ida. Mi esposa duerme sobre mi hombro y no puedo dejar de mirarla con ternura. Cada momento que paso con ella es nuevo y emocionante. Después del incómodo incidente con el tipo que se acercó a ella en la tienda de regalos, salimos a caminar por la playa. Obviamente mi teléfono viene lleno de fotos suyas posando para mí, pero también hay muchas mías y otras tantas juntos.
Nunca pensé en volver a casarme y mucho menos tener una luna de miel. Pero fue perfecta desde el primer momento. Tengo que agradecer a sus tíos por pensar en esto y a ella por poner esas letras chiquitas en el contrato. Me ha demostrado que será una excelente abogada. Y por supuesto que la necesito en mi despacho.
