45. ¿Sexo de reconciliación? Franco Siento que mi pequeña esposa se remueve en la cama. Su reloj biológico la está despertando. La tengo entre mis brazos, pero no se ha dado cuenta. No pude pegar un ojo en todo el tiempo que estuve acostado en ese incómodo sofá. Ahora me doy cuenta de que es horrible. Debo cambiarlo, porque, aunque no pienso ir a dormir ahí de nuevo, quiero explorar todos los rincones de este apartamento con mi chica. —Mmmm –suelta un murmullo que me parece encantador y terriblemente seductor. No entiendo como aún dormida luce tan perfecta y hermosa. Creo que la persona que inventó el personaje de la bella durmiente, debe haberse basado en alguien tan hermosa como mi mujer. —¿Dormiste bien? –le digo al oído y veo que se sorprende. Abre los ojos con sobresa