53. Las palabras no salen
Franco
—Por favor, abogado, pase a su siguiente testigo.
¡Lo conseguimos! Nuestra apelación procedió y el juicio contra el profesor está siendo llevado por una jueza que se dice es incorruptible y que odia el abuso hacia las mujeres.
—Llamo al estrado a la señorita Mara Santos. –Una tímida chica pasa al frente para declarar en contra de su acosador.
—Señoría, protesto, no estaba enterado del testigo. –El abogado defensor está furioso, pero es que fue de último momento. Localizamos hace poco a la joven y tenía miedo de presentarse. Desde que tomé el caso, ya han pasado más de un año.
Volteo a ver a mi esposa que luce seria en el área del público.
—Señoría, aquí están los documentos de la testigo. –la jueza los recibe y los lee. Levanta el rostro
