El inicio

1397 Words
Capítulo 1: El inicio El viaje era principalmente de trabajo de mis  padres, aunque de igual forma íbamos a poder pasear en los diferentes bosques de Australia, estaba muy emocionada ya que iba a conocer lugares nuevos, pero, durante el vuelo  pasó algo que cambió mi vida; él iba a reunirse con unos compañeros en Australia al llegar los cuales nos iban a llevar a los bosques para evitar que nos perdiéramos en ellos.  En el vuelo, algo salió mal y el avión simplemente empezó a descender. Recuerdo la reacción de mis padres, ambos estaban como en una especie de shock,  no sabía qué pensar o hacer, tenía miedo, pero confiaba en que mis padres me iban a cuidar.  Al inicio del vuelo todo estuvo muy tranquilo, estaba muy nerviosa ya que era la primera vez que viajaba en avión, al montarme sentia una sensacion de miedo por las alturas, todo iba muy bien, habían pasado unas horas desde que había despegado el avión, de un momento a otro todo paso, el avion empezo agitarse de forma brusca, no recuerdo muy bien, solo se que escuchaba algunos gritar. De arriba de los asientos cayeron unas cosas, todo fue como en cámara lenta.  Mis padres no se movian de sus asientos, solo se quedaron mirando uno al otro, apesar de mis lagrimas y el desespero en el lugar, ellos solo se miraban entre si, parecian estar en shock, minutos antes del impacto mi madre me agarro de mi asiento y me sentó en sus piernas para luego abrochar el cinturón de seguridad para las dos, mi padre, por otra parte se estaba quitando el cinturón y agarrando dos almohadas, puso una a cada lado mío y luego nos abrazó a mí y a mi madre, no podía ver nada más que la cara de mi padre, sentía como nos apretaba con algo, pero no sabía que era, luego de eso se escuchó un fuerte golpe y todo se volvió n***o.  Jamás volví a ver a mis padres. Al despertar estaba en un cuarto de hospital, tenía moretones en mis brazos y piernas, en mi pierna izquierda tenía una venda en mi talón izquierdo y en mi muñeca derecha un yeso. Recuerdo que quería ver a mis padres, pero jamás me contaron nada, tenía miedo y no sabía qué pasaba y en donde estaban mis padres que no venían a verme.  Habían pasado 5 días desde que había despertado en el hospital, siempre venía una linda enfermera que me ponía caricaturas y me contaba sobre sus gatos y sus lindas travesuras. Inicio flashback -Dénia- la llame antes de que saliera de mi habitación -Dime mi niña- me respondió ella desde la puerta -¿en donde están mis padres- Ella no me respondió, solo me miraba y aunque abría su boca la volvió a cerrar sin decir palabra alguna. Lo siento tanto, mi niña- Por sus palabras y su mirada de pena, comprendí que ya no iba a volver a mirar a mis padres nuevamente.   fin flashback Durante mi estadía en el Hospital Adventista de sydney, la enfermera Denia me visito todos los días, incluso cuando descansaba; conocí a otros niños que estaban en este hospital e hice varios amigos, antes de irme recuerdo que Denia  me explico que iba a volver a mi país a una nueva casa, donde habían muchos niños y podía hacer muchos amigos y algún día irme a otra casa donde iba a tener una mama y papa que me van a cuidar mucho e incluso hermanos. Antes de irme las enfermeras, algunos doctores y los amigos que hice me hicieron una pequeña fiesta donde comimos pastel, me regalaron ropa y Denia me regaló un hermoso oso de peluche color marrón. Cuida mucho este oso- me decía Denis mientras lo sostenía junto a mi Lo voy a cuidar mucho, Denia, muchas gracias por ser tan linda conmigo- ella se acerco a mi y me dio un tierno beso en la frente mientras me entregaba el oso. Después de la pequeña fiesta algunas enfermeras y doctores me pidieron que les mostrara cómo me quedaba la ropa que me regalaron, estuvimos un rato en eso, todos me dijeron cosas muy bonitas, que fuera fuerte e  iban a extrañar mi sonrisa. Al dia siguiente llego una señora muy elegante por mi, ella me dijo que me iba a llevar al aeropuerto, su nombre era Martha, ella me contó un poco de como era mi nuevo hogar y me mostró una foto de la fachada de la casa, el lugar era una casa grande donde vivían varios niños al igual que yo ya no tenían a sus padres, este lugar era de unas lindas monjas, se llamaban “las hermanas de paz”. Mirando la foto se veía un lugar muy lindo con un bonito jardín lleno de flores, me emociono un poco vivir ahí con otros niños que podían entender cómo me sentía, cosa que los demás no podían entender muy bien.  Luego de terminar de guardar en mi mochila  la ropa nueva que me regalaron, agarre mi oso de peluche y salí de la habitación junto a Martha, afuera me esperaba Denia, la cual está con los ojos aguados, junto a ella el doctor Mike y otras enfermeras, todos me abrazaron y me dieron mucho besos, la última en despedirse fue Denia, ella nos acompañó hasta la camioneta que nos llevaría al aeropuerto, ahí me dio un fuerte abrazo y me dijo que siempre iba a estar en su corazón, iba a extrañar mucho a Denia. Al llegar al aeropuerto Marta me llevó a una linda sala de espera, ahí estuvimos un rato hasta que llegó una linda azafata. Mackensie, ella es Maddie- Era una linda chica rubia como yo, Maddie tenía una hermosa sonrisa y vestía de un traje rojo con una falda muy bonita con una linda boina -Maddie es una amiga mía, ella va a ir contigo en el avión, ya que yo no puedo ir contigo, ella te va a cuidar durante el viaje. Hola Maddie, me llamo Mackensie- le  estire mi mano para estrecharla con la de ella. Hola Mackensie, es un gusto conocerte - estiró su mano para estrecharla conmigo-  durante el viaje voy a estar contigo y cualquier cosa que necesites solo tienes que llamarme- me dijo Maddie mientras estrechaba mi mano Bueno, vamos subiendo al avión- Dijo Marta mientras llevaba mi mochila. Al subir al avión sentí un gran susto y me empezó a doler la barriga, ambas mujeres me llevaron a mi asiento, ahí Marta acomodo mi bolso en un cajón encima de  mi asiento y me ayudó a sentarme en el asiento y abrochar mi cinturón. Mucha suerte, querida Mackenzie- con eso ella se alejó de mí y se acercó a hablar algunas cosas con maddie y luego se bajó. Tal vez tengas miedo, pero te prometo que todo va a estar muy bien, linda- me dijo maddie luego que Marta se bajara del avión-cualquier cosa que necesites presionar este botón y yo vengo de inmediato- me dijo mientras señalaba un botón en uno de los reposaderos del asiento. Durante el vuelo todo fue muy tranquilo, al llegar a estados unidos en el aeropuerto me estaba esperando una señora mayor; Ella me llevó a una casa llena de puros niños y niñas, todos diferentes a los otros, lo único que teníamos todos en común, es que ninguno teníamos padres. Estuve en esa casa por unos meses, luego me llevaron a tres casas diferentes. Ninguna me gustaba, las personas siempre eran malas conmigo, hasta que un día, llegó una hermosa familia, me agradaban, ellos me compraban helado, me llevaban a parques y me trataban con mucho cariño. La señora, me recordaba a mi mamá. Un día me llevaron a su casa y todo fue mejorando, o bueno, eso creí yo... Después de seis meses con ellos, dijeron que me iban a llevar de vacaciones, nunca me dijeron a donde, solo me decían que me iba a encantar. Para el viaje debíamos tomar un avión, recuerdo que eso me puso muy nerviosa, así que Ana, me dijo que tomara un jugo que me haría perder el miedo. Después de ese jugo no recuerdo más, no me acuerdo del avión, el aeropuerto, solo sé que desperté en un lugar oscuro, ese era el primer día de mi infierno.
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