Capítulo 7. ¿Quieres subir a mi habitación?, ahí nadie podrá molestarnos. Celeste corrió sin mirar atrás, ella dejó a Leonardo Coppola de pie, molesto y lleno de ira, observando como aquella aparente inofensiva y enferma mujer desaparecía de su vista. Celeste llegó a la mansión de los Dupont agotada, haber huido del auto de Leonardo no le sirvió para nada, lo único que consiguió fue estresarse y olvidar el sobre con sus resultados en él. Leonardo intentó seguirla, pero ella ingresó por unos pasajes donde el auto de él no pudo ingresar y terminó perdiéndola de vista. Celeste dejó los resultados debajo del asiento, así que Leonardo nunca se percató de ellos, sin embargo, luego de haberla visto llorar el CEO no podía sacársela de su mente, no solo, no le llegó a ofrecer el trabajo de aman