Por fuera el lugar parecía un bar para tragos normal, Eliot siguió las indicaciones que el señor Henning le había dado, pasó las mesas hasta llegar cerca de los baños, habían cuatro puertas, dos de los baños y dos sin rótulo, tocó la que le habían indicado, un hombre alto y robusto le abrió, la típica seguridad, Eliot le dio la clave y lo dejaron pasar, bajó unas escaleras y ahí se encuentra un lugar de juegos, había visto los planos, pero parece que ese lugar estaba creciendo, sería una buena idea encargarse del lugar aunque esa noche solo había ido con un objetivo.
–¡Eliot! –escuchó su nombre y vio a Heinry Henning jugando Craps, Eliot realmente odiaba que lo llamará de esa manera.
–Señor Henning, admito que estoy sorprendido con el lugar –mencionó al acercarse.
–A veces es bueno d
