“… Tú y yo haciendo una fábula. Tú y yo jugamos un verso sin comas si reglas…” Emmanuel. **** Manizales-Colombia. Carlos Mario Duque, la noche anterior no había podido conciliar el sueño y hoy se dirigía a la casa de su madre. Lugar que por cierto no le gustaba ir por muchos recuerdos que lo atormentaban. En una emisora de radio en la cocina sonaba «Yo no lloro por llorar by Diego Verdaguer» «Si me enamoré algún día, nunca fui querido como los demás. Si he sembrado rosas, tuve las espinas, pero nada más» Esa parte de la canción le llegó a lo más profundo de su alma, se estremeció hasta los huesos, inhaló hondo, e ingresó a la sala de su casa, con su imponente presencia, se quitó las gafas de sol. —Buenos días, mamá —Se acercó y le dio un beso en la mejilla. Ella lo miró con gelidez