Alcanzando las estrellas

Capítulo 1.

Las cosas nunca pasan como siempre lo he deseado, mayormente salen diferentes y en algunos casos ni salen. Yo solo quería una vida tranquila lejos del amor de la juventud, ya mucho "amor" tuve en mi adolescencia, aunque no recuerde mucho de esa época, sin embargo mis planes, mis reglas se fueron a la basura cuando lo conocí o bueno volví a ver.

Tener que conocer nuevas personas no es mi mayor fuerte y más desde que ocurrió esa desgracia hace varios años atrás, volver a intentar hacer amigos e intentar entablar una amistad con alguien que ya conocías, pero que no recuerdas porque tu mente los borro, no es algo gratificante.

Soy reacia a conocer gente nueva, no es mi motivación número uno.

Pero cuando lo conocí o como le quieras llamar, mi mundo dejó de tener sentido, esas reglas que estaban escritas en rojo en mi libreta fueron desechadas.

Aquello por lo cual había luchado se vino abajo, se desplomó como una torre de dominó. La simple idea de enamorarme nuevamente me parecía absurda, ¿Otro corazón roto? No gracias, ¿Enamorarme a primera vista? ¿Eso acaso es real?

Aunque no conocía o sabía a ciencia exacta de quién me había enamorado sabía perfectamente que él susodicho me hizo mierda, por eso enamorarme no estaba en mis planes nuevamente, mis metas estaban claras y aunque no recordaba me estaba dejando llevar por las reglas que tenía y las especificaciones que leía todas las noches al dormir.

No creía en el enamoramiento a primera vista, para mí solo eran simples palabrerías estúpidas. Palabras que solo sabía que existían en los libros de romance que tenía apilados en mi cuarto. No creer en eso cuando eres alguien que se la vive enamorado de personajes no reales puede ser absurdo e hipócrita en la gran mayoría, pero era así, no creía en eso hasta que me dieron con un guante por completo en el rostro y todas mis opiniones se esfumaron.

Verlo sonreír amablemente mientras se estaba muriendo dentro, hablar amistosamente con los invitados fue el duro cliché para mí corazón.

Sentí que el mundo se estaba riendo de mí y con gusto, luego de escupir al cielo diciendo que no creía en nada del amor a primera vista, que no me enamoraría nuevamente vino ese giro y todo cambió para mí, sentía que la antigua Nara se estaba riendo de mí, porque él nombre de él se repetía varias veces en mi libreta.

-Tierra llamando a Nara-Junto mi cejas y hago una mueca al sentir un golpe en mi frente-Vamos Nara préstame atención, te estoy diciendo algo importante chama.-Ruedo mis ojos y suspiro asintiendo-Bueno el caso fue que salí con él nuevamente y vuelvo a decir es un completo idiota y demasiado mandón -

-Sin embargo lo volverás a ver ¿Cierto Mari?-

-Bueno si, es que es lindo y me trata muy bien, es decente, amable -

-Posesivo nivel por los cielos .-Hago una mueca -¡Te está diciendo como debes actuar por el amor a Dios!, Mari .-Dejo el trapo en el mostrador lejos de la vista de los clientes.

-Pero él te agrada .-Me observa desde el otro lado, aprovechamos a hablar antes de abrir.

-Como amigo, no me agrada como novio para mí mejor amiga, pero si ese es al que quieres, de ningún modo no hay nada que pueda hacer, solo ayudarte y prestarte mi hombro para que llores .-Me encojo de hombros.

Mari abre sus ojos ofendida y me tira el trapo al rostro.

-Por eso te amo .-Toma mis mejillas con una sonrisa-Amo tus cachetes .-Me alejo.

-Si, si, pero duelen deja .-Hago una mueca masajeando ambas mejillas.

Dan otro compañero de trabajo cambia el aviso que antes decía cerrado a abierto.

-Ya quiero salir .-Se queja Mari a mi lado mirando como el restaurante se empieza a llenar.

-Fuerza Mari, apenas iniciamos, nuestro turno termina a las dos de la tarde .-Dan la toma por los hombros amistosamente.

-Apenas son las siete .-Se queja dejando caer su cabeza en el hombro de él.

-Auch .-Me quejo al ver un corto largo en la palma de mi mano.

Genial buena manera de empezar el maldito día, ya decía yo que me estaba yendo particularmente bien.

-¿Qué pasó? -Dan se acerca con precaución.

-Me corte con esta cosa, ni se cómo lo hice.-Apuntó a la esquina del mesón.

-Voy a decirle nuevamente al jefe que arregle esa esquina, ven .-Me llama y yo lo sigo-¿No puedes tener un buen día sin que te pase una desgracia?-

-No, mis desgracias vienen en el paquete de Nara, sin ellas no sería yo, aunque preferiría que me dejarán de pasar -

-No se puede Nara, eres demasiado torpe .-Mari se asoma, niega con una mueca de asco.

-Odia la sangre .-Decimos juntos.

-Pero hablando en serio, tu desgracia viene contigo de la mano, eres demasiado torpe y despistada. Recuerdo que cuando te conocí me caíste encima-

-Si lo siento de nuevo por eso .-Hago una mueca al recordar, ese día fue el peor día de mi vida-Bueno soy un caos andante.-Sonrió para evitar llorar cuando me echa alcohol.

Arde joder.

-¿Cómo te cortaste? -Termina de untar una crema y envuelve mi mano.

-No lo sé, pero siempre me pasa, creeme -

-Te creo y te cuidado, no te lastimes más por favor-

Asiento y ambos nos alejamos.

Miró a la hora siete y seis minutos.

Mayormente en el verano cuando no estamos en la universidad siempre tenemos este horario que nos gusta más.

Las mejillas de Dan se tornan rojas y sus ojos brillan.

Él a sido nuestro compañero desde que entramos a trabajar aquí, los tres iniciamos como novatos hace tres años, Dan es alto, ojos café claros y cabello n***o, piel oscura y una hermosa sonrisa, es un buen español que desde que conoció a Mari quedó flechado por ella, claro el sentimiento no es recíproco.

Para Mari él único merecedor de ella es Noé, un amigo de la infancia.

El cabello morado de mi mejor amiga es rápidamente apartado del rostro de ella, Mari se voltea apretando las mejillas de Dan con una sonrisa.

Siendo sincera soy fan de ellos y si algún momento se hacen novios, haré una fiesta por lo alto.

Digna fiesta de un venezolano.

-¿Y cómo vas? ¿Qué van a hacer este verano? -Dan nos pregunta cuando ambas volvemos de atender las mesas.

El restaurante no es muy grande, pero tampoco tan pequeño es justo para pocos empleados.

Nosotros tres Dan en la caja, Mari y yo las meseras y en la cocina el chef y sus ayudantes.

-No lo sé, por ahora terminaré las tareas que nos dejaron en la universidad y ya luego veré que hacer con mi vida .-Lo miró con una sonrisa, ambos volteamos a ver a Mari mientras ella le sonríe al teléfono.

-Saldré con mi chico .-Mueve su cuerpo, miró por el rabillo del ojo a Dan, él baja la vista, pero luego niega y coloca una sonrisa tensa en sus labios -Haré las tareas, para luego verme con él -

-Entonces tendré el departamento para mí sola ya que Lia tampoco está .-Sonrió feliz.

-No siempre, no me quiero alejar completamente de ti, sin mi te mueres mi amor-

-Menos mal que terminaron de arreglar mi cuarto, ya no escucharé tus gritos a mitad de la noche o madrugada .-Hago una mueca.

-Tu me amas -

-Si lo haga chama, pero no me gusta escuchar como le dan sin tregua a mi mejor amiga, no gracias.-Me alejo de ellos cuando se adentran mas personas.

Al volver suspiro, llevo su orden y vuelvo.

-No quiero ni imaginar un poco el calor que hace allá fuera .-Hago una mueca.

-Estamos en verano, perfecto para playas, acampadas, paseos .-Dan murmura limpiando un vaso.

-Hablando de playas ¿Cuando vamos?-

-No lo sé, ustedes dos arreglen el día a mi solo me dicen y ya .-Me encojo de hombros.

-¿Entonces vamos el jueves? Es nuestro día libre .-Asiento pensativo.

-Si, estamos a lunes, ya el jueves he terminado todo -

-¿Cómo te dicen máquina? -

-Los profesores no nos dejaron mucha tarea Mari, claro esto es en mi caso, en el tuyo es otro tema -

-Malditos todos, tengo una rumba de tareas.-Me río mientras Dan la anima.

Ah, el amor es tan hermoso, pero mucho más hermoso lejos de mí.

Más si se trata de ese hermoso hombre alto, pelinegro, ojos negros, piel blanca y sonrisa perfecta, con sus dos colmillos largos.

Él es la jodida tentación andante para mí.

El motivo de que mis reglas se hayan ido a la fregada.

Y es totalmente inalcanzable para mí, además de que él no siente nada por mí, solo me ve como una conocida. Él solo tiene ojos para su novia.

Yo solo soy un cero a la izquierda por así decirlo, la chica obsesionada con los libros, amante del K-drama y el C-drama, del anime, manga y todo eso. Yo solo soy una chica un poco normal, muy diferente a las chicas que a él le gustan. Una chica con una mente del asco.

Qué mierda de vida.

Que asqueroso es el amor.

Las cosas pueden ser complicadas cuando quieren, extrañas y llenas de baches mayormente. No estar en Venezuela es una de esas, irte al extranjero, otro país, empezar de nuevo es deprimente.

Aunque sea por un mejor "futuro"

Mi turno termina y salgo cuando llegan los del siguiente turno, me despido de Dan y Mari que corre a los brazos de Noé.

-Hola Nara .-Me sonríe.

A él lo conocí gracias a Mari, somos buenos amigos y debido a eso, sé cómo es él, por esa razón no me agrada para mí mejor amiga.

-Hola Noé y adiós.-Muevo mi mano alejándome.

-Tal vez te vea en la casa .-Alzo mi mano y levantó el pulgar.

Camino alejándome, muerdo mis labios colocándome mis audífonos. Sigo mi camino en silencio mientras que la voz de Dan de imaginé dragons me transporta a otro mundo.

Levantó la vista observando la librería, sonrió y me adentro.

-Buenas tardes .-Murmuró al pasar por la caja.

-Buenas .-Un chico menor que yo, me responde con sus mejillas sonrojadas.

Sigo mi camino perdiéndome, buscando algún libró. Luego de que mi vida cambiará por completo me refugié en los libros. Tener un accidente y luego enterarte que tenía el corazón roto y no recordar por qué puede ser del asco.

El mundo dejó de tener sentido, me encerré en mi misma de una forma que me estaba matando por dentro, creí que las personas que tenía cerca serían mi salvación y no lo fueron, ellas fueron mi perdición.

Aunque algo bueno salió de todo eso, no recordar mucho de ellos me ayudó a nadar en la corriente que intentaba arrastrarme mar adentro.

Por qué dicen que siempre de las cosas malas se puede sacar provecho y perder la memoria es una de esas.

Estar encerrada en un caparazón es con lo que aún lucho, no sé decir mis sentimientos, expresarme, odio las multitudes, mi mente es un torbellino de pensamientos llenos de contradicción y negatividad la mayor parte del tiempo, odio que me toquen si yo no les permito, muchos dicen que soy extraña, ahora luego de tanto tiempo lo estoy empezando a creer. Me convertí en una persona diferente.

Yo soy un caos y nadie puede con este caos.

Siento un golpe directo en mi espalda intento sostenerme de algo, pero es imposible, alguien me toma por la cintura, sin embargo es demasiado tarde.

Hago una mueca al estar en el piso.

-Oye levántate pesas .-Ahogó un gemido lastimero cuando se para.

-Lo siento mucho.-Me volteo, tomó su mano extendida, me amarró el cabello con sumo cuidado para no lastimarme más la mano y luego empezó a limpiarme el cuerpo-En serio lo lamento, no te vi .-Ruedo mis ojos, al levantar la vista parpadeo varias veces, él me recuerda a alguien.

-Ya que, no me hice daño así que está bien.-Me encojo de hombros.

Su ojos negros me miran llenos de preocupación, junto mis cejas al detallarlo más.

Alto, cabello n***o y ojos negros, labios rojos, piel blanca y sus mejillas se encuentran sonrojadas, su cuerpo es flaco, pero se nota que está ejercitado.

Tragó saliva negando, aunque estemos en el mismo país cada uno está en diferente lugar, no es él.

Aunque se parezca mucho.

-Bueno, debo irme .-Tomó el libro que aún está en el suelo.

Paso por su lado sintiendo mi corazón latir de prisa.

Me acerco al mostrador, mis manos sudan.

-Hola .-Me sonrió el chico con alegría.

-Hola .-Mantengo mi rostro serio, mi pulso se vuelve a disparar cuando siento nuevamente la presencia de él detrás de mí.

Envuelve mi libro y le tiendo el p**o.

-Hola Noah .-Trago saliva, tiene que ser otra casualidad.

No puede ser que luego de tres años lo vuelva a ver.

No me niego, no es él.

-Hola Thomas .-Su voz hace estragos en mí-

No, no, no.

Si es él.

Me volteó siento que todo pasa en cámara lenta, cuando lo tengo frente a frente su sonrisa me hace ahogar.

-Hola y perdóname por hacerte caer, en serio, no te vi .-La vida puede ser un asco cuando quiere.

Levantó mi cabeza, al ver su sonrisa casi me ahogo. Maldita y hermosa sonrisa perfecta, sus dientes blancos alineados, sus dos colmillos sobresalientes.

No me reconoce, no me reconoce.

Respira profundo Nara.

-Hola, y tranquilo -

Mierda y más mierda.



Nos leemos de nuevo.

¿Cómo están?

¿Les gustó el capítulo?

Está historia la he cambiado mucho, pero es porque no me sentía bien con las viejas, ahora está, siento que está es la correcta, me gusta más.

Espero y les guste.

Los nombres de los protagonistas serán cambiados.

Nara y Noah, nuestros protagonistas.

Siendo sincera está versión me está gustando más ya que la escribo a mi gusto a mi propia imaginación y no como querían que la escribiera.

Dejen sus votos y comentarios.

No leemos pronto..