—Bueno —soltó Laura—, yo no es que quiera tener una relación con Cristian, apenas lo conozco y, este… Solo es una cita de amigos. Elián miró a su novia, al parecer pensaron lo mismo. Se veía a simple vista que Laura era muy ingenua y ya se había ilusionado con Cristian. Ya caída la noche, los jóvenes caminaban por la Bahía mientras conversaban de todo un poco. —…Ella siempre ha sido bastante inocente, de hecho, cuando éramos pequeñas, Laura era muy tímida. En primaria, siempre estaba a su lado para protegerla de nuestros compañeros que solían meterse con ella. Pensaba que yo era el dragón que protegía a la pequeña e inofensiva reina. ¿Cierto que parece una muñequita tierna? —Eliana sonrió mientras estaba sumida en sus pensamientos. —Pues sí, Laura es muy bonita y tierna —aceptó Eli