El señor de los camellos, les explica como deben de subirse y bajarse, les dice hasta donde deben ir y regresar. Adam le ayuda a Anna a subir al camello y le toma una foto, y luego el se sube a su camello.
El gran animal, va lento y Anna se siente agradecida con Adam ya que el le llevo un sombrero, Anna abre los brazos para una fotografía y luego, ella fotografía a Adam.
—¿Te estas divirtiendo?
—Demasiado —sonrió Anna
—Creo que quedaremos un poco broceados
—¿Lo crees?
Ríen.
Dan un paso por unos 20 minutos, ya que no resisten el sol, deciden regresar al hotel.
—¿Qué te parece ir al pueblo luego de nadar un rato?
—Si, me gustaría comprarme algo
—Bien
En la habitación, cada uno ocupa un baño y se ponen sus trajes de baño. Adam sale primero con sus bermudas, se queda en la cama esperando a Anna, revisa si tiene mensajes o llamadas, a los minutos, Anna sale con su bikini. Adam la mira por arriba de su teléfono, ella se coloca una toalla en un hombro y se agacha para sacar unas cosas de su maleta.
Ella voltea a verlo y lo atrapa mirando, así que Adam ríe.
—Perdón, soy hombre
—Eso es obvio
Adam sonríe y se encoge de hombros.
—¿Bajamos ya?
—Si, vamos
Adam apaga su celular y lo mete en una gaveta de la mesa de noche. Salen a la alberca y ponen sus toallas en unas sillas. Van a las duchas para quitarse el sudor y Adam sin esperar mas, se tira al agua y Anna decide entrar por las gradas.
—¡Se siente tan bien! —dice Anna después de sumergirse por completo
—Si —sonríe Adam flotando de espalda
Nadan un rato hasta que se detienen a un lado de la piscina.
—Quiero volver agradecerte por esto
—También me estoy divirtiendo, son unas vacaciones para ambos
Anna sonríe y mira hacia el agua.
—¿Que piensas?
—Yo... —Anna sacude la cabeza
—Dime —se pone de pie frente a ella
Ella mira su pecho y luego, de nuevo al agua.
—Dime —sonríe y le agarra el brazo cuando trata de alejarse
—Es demasiado vergonzoso
—Da igual, quiero saber, tengo una duda enorme por saber lo que pasaba en esa cabecita tuya
—¿Es una duda grande?
—Bueno, la verdad es que seria genial leer las mentes de las personas, imagínate cuanto ayudaría eso en un juicio
—Sin duda ganarías, aunque creo que ya lo haces sin necesidad de ese poder
—No puedo negar eso —ríen —pero volvamos a lo que estábamos, dime que pensabas
—Enserio, no puedo decirte
—¿Porque es muy vergonzoso?
—Si
—Si es vergonzoso, debe ser algo como...¿un beso talvez? —Anna lo mira sorprendida y Adam ríe —con que eso es, ¿debería besarte?
—¿Qué? —eleva la voz y abre aun mas sus ojos
—Tal vez algo rápido como esto —Adam se inclina y presiona su boca con la de ella. Anna deja de respirar y no puede evitar cerrar los ojos, Adam se separa un poco de ella y luego, vuelve a ponerse recto, la mira y sonríe —¿Qué? ¿Has quedado demasiado sorprendida? ¿Fue realmente bueno?
Anna abre sus ojos y lo mira seria.
—¿Tan impresionante?
Adam no se espera cuando Anna pone sus brazos alrededor de su cuello, hace fuerza para levantarse y envolver la cadera de Adam con sus piernas, toma su cabello en un puño y tira su cabeza hacia atrás, y entonces, lo besa. Adam frunce el ceño cuando ella abre su boca y lo besa con tal intensidad.
Adam pone sus manos en la cintura de ella para apartarla pero ella se presiona mas a su cuerpo. Anna separa sus labios, pero no suelta su cabello.
—¿Qué? ¿Sorprendido?
Adam la mira en silencio con la respiración agitada, pero la aparta.
—¿Terminaste? Subiré a cambiarme para que vayamos al pueblo —dice Adam dirigiéndose a las gradas
—Subiré en un minuto
—Ok
Anna mira a Adam tomar su toalla e irse. Anna se da la vuelta y se sumerge en el agua, y se queda un momento ahí.
'¿Fue realmente bueno lo que hice? A veces puedo ser realmente estúpida como una adolescente'
Sale del agua y respira fuertemente. No quiere quedarse otro minuto mas ahí, así que sale de la piscina, toma su toalla y va a la habitación. Cuando llega al cuarto, escucha la ducha encendida, así que va hacia la maleta, saca un jeans y una camisa, junto con su ropa interior, y se adentra en el otro baño.
Adam ya esta listo cuando Anna sale vestida, se sienta en la cama y se pone unos tenis. Hay un espejo al lado de Adam así que se acerca a cepillarse el cabello, pronto comenzara a oscurecer afuera así que Anna piensa que esa caminata por el pueblo será aun mas agradable.
—¿Estas lista?
—Si
—Vamos
Anna lleva un pequeña cartera y se la pone cruzando su pecho, Adam solo mete su billetera en uno de los bolsillos de su pantalón corto junto a su celular, y no falta la cámara colgando de su cuello. Ambos salen sin decir una palabra, toman un taxi del hotel que los lleva hasta el pueblo, todo esta lleno de colores, hay muchas mantas, ropa y cosas hechas a mano que le encantan a Anna.
Anna se acerca a una mesa que tiene muchas pulseras, sombreros y muchos Hiyab colgados. Anna agarra una pulsera rosado oscuro con azul y la pone en su muñeca.
—Esta bonita —sonríe —¿te gusta? —se voltea para enseñársela a Adam
—Si, te queda bien
Anna se da vuelta.
—Quiero esta —le dice a la señora pero entonces recuerda que ella habla otro idioma —am...adam...
Adam se acerca y le dice en árabe a la señora que llevara esa pulsera. Anna toma un hiyab verde musgo y trata de ponérselo, pero se enreda en el.
—Tu, enserio que... —sacude su cabeza y aparta las manos de Anna —se pone de esta forma —se lo quita y comienza a ponérselo bien
—Gracias, parecía imposible
La señora le alcanza un espejo y Anna se mira en el.
—Me queda muy bien, también quiero comprarlo
Adam le dice a la señora y el lo paga. Mientras siguen viendo mas tiendas y pequeños puestos, Anna trata de ponerse la pulsera pero siempre se le termina cayendo hasta que Adam se cansa y se la pone.
—¿Ni siquiera puedes ponerte una pulsera?
Adam se voltea y comienza a caminar, pero se detiene cuando Anna le grita.
—¿¡Que sucede contigo!? ¿Por qué estas tan molesto? ¡Yo debería de ser la molesta! ¿Simplemente besas a las chicas y te sientes un maldito dios? ¿Acaso no debía besarte porque fuiste tu el que me hizo un favor al besarme? ¡Solo estábamos jugando!
—Dejemos esto y sigamos, tengo hambre
—Entonces, ¿porque estas enojado? Todo esta bien hasta lo que paso en la piscina ¿acaso te sentiste ofendido? Discúlpame si fue eso, seguro no soy la primera que lo hace
—Cállate y vámonos al hotel
—¿Acaso te gusto un poco?
—No, ni un poco
—¿Esta seguro?
—Si
—¿Entonces, porque te preocupas por mi?
—No lo hago
—Entonces, voy a quedarme por aquí todavía, puedes regresar al hotel si quieres —Anna se da la vuelta y camina al lado contrario
Adam suspira y molesto se va.
{...}
Adam se despierta sorprendido por un trueno, mira hacia todos lados y recuerda donde esta, enciendo la lámpara y coge su teléfono para ver la hora. Salta de la cama y se pone los zapatos, ya ha pasado demasiado tiempo y Anna no ha vuelto al hotel.
Adam sale corriendo del hotel y toma un taxi para ir al pueblo. Cuando se baja del taxi, llueve tan fuerte que apenas puede ver, corre entre medio de la gente que se refugia donde hay techo ya que es imposible salir debajo de ellos sin empaparse por completo.
—¡Anna! ¡Anna! —grita tanto como puede
Adam se detiene al lado de una fuente y mira hacia todos lados, un señor aparece corriendo con una sombría y se acerca a él.
—Excusez-moi? Vous cherchez à Annabella? (¿Disculpe? ¿Busca a Annabella?)
—Si, vous savez où cela? (Si, ¿sabe donde esta?)
—Amenez-le à un restaurant qui a une robes incroyables autour de la, peut-être cela ce toujours là (La lleve a un restaurante que tiene una viste increíble de los alrededor, talvez este aun ahí)
—Je vous remercie, où est-il? (Gracias, ¿donde esta?)
El señor, ya que era un conductor de taxi, lo lleva adonde dejo a Anna. Adam le da las gracias y le pega, aunque ni se da cuenta cuanto dinero le deja. Adam entra al restaurante y como no la ve, sube a la segunda planta, se da cuenta que no hay techo y como llueve, todas las mesas están vacías. Pero entonces ve a una persona acurrucada al lado de la baranda. Adam se acerca a ella.
—Anna
Anna levanta su cabeza y lo mira a los ojos, tiene los labios morados y tiembla de frio.
—¿Porque has tardado tanto? —pregunta con voz temblorosa
—¿Qué?
—Que hayas venido...¿es un si?
—¿Un si? —le pregunta sin entender
—Un si me preocupo por ti y un si, me gustas
Adam no aparta la mirada de ella, le aparta el cabello del rostro y ríe.
—Vas a matarme
—Lo siento —dice triste
—Enserio eres un poco tonta
—Lo siento —Adam sonríe y se sienta a su lado y atrae su cuerpo al de él
—No necesitas disculparte conmigo, solo necesitas perdonarme
Anna levanta su cabeza para mirarlo y solo se quedan mirando a los ojos.