HURT

Capitulo 18.

—Puedes acostarte mientras pido un te o chocolate

—Quiero chocolate

Adam deja a Anna sobre la cama y la envuelve en sabanas, al terminar, Adam llama al servicio al cuarto para que les lleven dos tazas de chocolate y a los minutos, llegan a dejárselos. Adam le sirve la taza a Anna y luego, se sirve la suya y se sienta en su cama.

Después de su conversación, se habían quedado un rato mas bajo la lluvia hasta que al fin se detuvo, compraron algo de comida y cenaron en el restaurante, aunque pensaron que el frio se iría cuando sus ropas se secaron, paso lo contrario, ya que empeoro. Así que decidieron regresar al hotel.

—Fue un largo día, ¿cierto? —dice Anna

—Si, lo fue

—Sentí muchas cosas también

—Lo apuesto —pone una sonrisa ladeada en sus labios

—¿Tu...no sentiste nada? —pregunta descuidadamente

—Mmm...no, creo que no, aunque creo que lo que cenamos me dio gases

—¡Oye! — grita y Adam se carcajea —que difícil eres

—No mas que tu, imagínate cargar con una niña ha todos lados

—A veces solo quisiera golpearte

Adam ríe.

Cuando terminan el chocolate, se cambian de ropa para poder dormir, están muy cansado y les queda aun mucho por ver el día siguiente. Se acuestan en sus camas y apagan las luces.

—Buenas noches

—Buenas noches

Adam cierra los ojos y suspira cansado, estuvo durmiendo antes, pero toda la preocupación que le dio Anna, lo altero. Por otro lado, Anna no puede dormir nada ahora que las luces están apagadas, además de que hay unos ruidos extraños que se escuchan afuera que le están poniendo los nervios de punta.

—¿Adam? —no hay respuesta —¿Adam?

—¿Mmm?

—¿Enserio te dormiste tan rápido?

—Mmm...

—¿Sabes que es ese sonido?

—Noshishmm...

—¿Que pasaría si hay un ataque terrorista?

—Ssh...

—¿Puedo...dormir contigo?

—...

Anna suspira y se quita las sabanas de encima, se para en la cama, y como no hay mucha separación entre ellas, simplemente da un pequeño saltito para llegar a la de Adam, gatea hacia la almohada y levanta la sabana. Adam se despierta por el movimiento.

—¿Qué haces? —pregunta adormilado

—No quiero dormir sola

—No lo estas

Anna termina de meterse bajo la sabana.

—Di que si

—Solo no te muevas demasiado ni golpees mis costillas y mi estomago

—Creo que estarás tan dormido que apenas y te darás cuenta

—Me daré cuenta

Anna sonríe.

—Que descanses

—Ok

Anna lo voltea a ver y se ha quedado con la boca abierta dormido, sonríe aun mas y cierra los ojos.

{...}

Anna ya esta lista para cuando Adam al fin se despierta, se encuentra boca abajo y mira con los ojos adormilados a Anna que se peina a su lado. Anna se da vuelta y lo ve.

—Oh, ya despertaste

—¿Pensabas salir y explorar sin mi?

—No —sonríe —iba a buscar desayuno

—Hay servicio al cuarto —dice con su voz ronca

—De igual forma quería traerlo personalmente

—Esta bien —cierra los ojos de nuevo

—¿Tienes tanto sueño? —se inclina sobre el

—Ni te imaginas

Anna pone su mano en el cabello de Adam y comienza a acariciarlo, Adam abre los ojos y la mira.

—Estas tocándome como a un gatito

—¿Acaso no se siente bien?

—Como el cielo —vuelve a cerrar los ojos —¿Anna?

—¿Si?

—Me duele la espalda

—¿Y?

—Dame un mansaje

—No

—¿Por qué?

—Porque no quiero

—Eso rompe mi corazón

—Te lo mereces un poco

—Puedes simplemente acostarte sobre mi espalda

—¿Debería hacerlo? Suena divertido —ríe Anna

—Sube, sube

Anna se quita los zapatos y se sube a la cama, pone las rodillas a cada lado de Adam y se sienta en su trasero.

—Guau

—¿Qué?

—Tu trasero es duro —se lo pincha con el dedo

—¡Eppa, cuidado!

Anna ríe y se acuesta en la espalda de Adam, decide estirar sus piernas y las pone sobre las de Adam. Adam gime un poco por su peso, pero luego pareciera que volviera a dormir.

—Tengo hambre, ¿tu no?

—No te muevas, quédate ahí

—Ok —rueda los ojos —pero muero de hambre

—Pesas mucho, ¿y quieres seguir comiendo?

—¡Que grosero eres! —le pellizca un glúteo

—¿Puedes dejar mi trasero?

—¿Por qué el mío no es tan duro?

—Deberías de ir al gimnasio o hacer ejercicio

—Uh, prefiero pagar por una película

Adam ríe.

—¿Qué haremos ahora? —pregunta Anna

—Cuando regrese ayer, me encontré con la señora que nos ayudo con los camellos...

—¡Espera!

—¿Qué?

—¿Podemos llamarla "Señora Camello"? Seria divertido

Adam suspira.

—Cuando regrese ayer, me encontré con la señora camello —Adam siente a Anna sacudirse por la risa —hay un tour a camello ahora, comienza a las 10 y regresamos al mediodía

—Suena bien

—Ok —de repente Adam se levanta, tirando a Anna hacia el otro lado de la cama

—¿¡Que sucede contigo!? —trata de decirlo molesta pero se ríe

—Iré a bañarme, ¿Qué hora es?

—Cerca de las 8, bien tenemos tiempo para desayunar si queremos ir —la mira en la cama —te sugiero que aunque haga mucho calor, utilices una camisa manga larga, puedes tomar una gorra mía y ponértela arriba de la toalla que compraste ayer

—No es una toalla, es un hiyab

—Eso dije —Anna pone los ojos en blanco

Adam entra al baño y cierra la puerta. Anna se queda en la cama y decide vestirse como Adam le dijo, además de pedir servicio al cuarto. Pide un desayuno grande, ya que quizá podrían necesitar mucha energía.

Cuando Adam sale del baño, esta vestido con una camisa manga larga de tres botones de color gris y un jeans n***o. Camina descalzo hasta la cama de Anna, ella a puesto ambos platos ahí.

—Lo siento —dice con la boca llena —no podía esperar mas, moria de hambre

—No te preocupes por esas cosas, come tranquila —le sonríe Adam

Adam toma una toalla seca, que le pertenecía a Anna y comienza a sacudir su cabello. Anna lo observa desde su cama y se queda con el tenedor en la boca. Adam sin prestar atencion a nada mas, se sienta en la esquina de la cama y toma su plato. Come tan rápido que Anna no puede evitar decir algo:

—Creí que yo era la que tenia mas hambre

—Soy un hombre grande, como mucho

—Lo he notado

Adam le sonríe mientras mastica un bocado.

—Así que, ¿Qué haremos en ese tour?

—Pues...recorrer kilómetros y kilómetros de desierto —asiente

—Creo que eso es algo obvio, quería algo mas especifico

—Como lo he hecho tantas veces, me se todo el recorrido ¿sabes? —Anna pone los ojos en blanco

—Te odio —Adam se encoge de hombros

{...}

—Mi nombre es Allan, sere su guia, como ustedes, llegue aqui por unas vacaciones y termine quedandome —sonrie —espero que esten emocionados por conocer mas de Marruecos —todos aplauden —hablare ingles porque todos son extranjeros —mira al hombre a su lado —el es un enfermero que va acompañarnos por si ocurre algun accidente, si se siente mal o si siente cualquier cosa que sea fuera de lo comun, pueden decirle a él

—Un gusto poder acompañarlos este dia, mi nombre es Enrique, estoy a su servicio

—Bien, ya que todo esta listo, podemos partir, por favor, tomen sus camellos, no sabia que abrian tantos ahora asi que si pueden ir unos en pareja se los agradeceria —dice Allan —si alguien aun no lo ha hecho, pueden decirme para ayudarle y que no se lastimen

Adam mira a Anna a su lado.

—Podemos ir juntos, ¿no? —le pregunta Adam

—Si —asiente Anna

Adam va por un camello y cuando lo acerca adonde todos estaban reunidos, ayuda a Anna a subir, para despues montarse detras de ella. El guia da unas instrucciones y en fila, los camellos comienzan a andar. El aire se vuelve mas caliente a medida que avanzan, el guia les muestra comunidades que residen en lo profundo del desierto y explica sobre la educacion de estas personas.

Cada camello iba equipado con suficiente agua para todos pero deciden hacer una parada en una de esas comunidades, dejan amarrados a los camellos y se adentran a una pequeña ciudad cubrida por mantas de colores. El guia les dice que pueden recorrer tanto como puedan por una media hora y que luego regresen.

Adam toma la mano de Anna y la lleva adentro, siendo los primeros en ingresar. Las personas los resiven con felicidad y sienten la calidez sincera.

—¿Podemos comer de eso? —le pregunta a Adam mientras señala unos dulces

—Claro —se acercan a la señora que los vende

—¿Que van a querer? —sonrie la anciana

—¡Habla ingles! —sonrie Anna emocionada

—Muchos turistas vienen aqui, es una parada que siempre toman, se nos volvio necesario —su pronunciacion no era de las mejores pero era mejor a que hablaran arabe

—Puedo imaginarlo —sonrie Anna

—¿Y que son esos? —señala Adam

—Se llaman Cigarrillos de Almendra

—Wow —dicen ambos

—¿Les gustaria probar un poco?

—Por favor —dice Adam

La señora les corta un trozo a cada uno y lo pruevan al mismo tiempo, sus ojos de inmediato van hacia atras y el sonido "Mmm...", sale de sus gargantas.

—Denos unos cuantos para llevar —dice Adam inmediatamente luego de tragar

—Por supuesto —sonrie encantada

—¿Y esas son donas? —pregunta Anna

—Son Roscos de dos cítricos

—¿Que tienen? —pregunta Anna

—Naranja y limon

—Denos cuatro de esos —dice Adam

Ya que la señora vendia por montones esos postres tradicionales, continuan viendo la demas comida mientras se comen lo que acaban de comprar. Continuan probando y comprando, y divirtiendose.

Anna le da una gran mordida a unos pasteles de leche, cubiertos con un polvito y se llena las comisuras de la boca, y Adam sonrie viendola.

—¿Porque me ves asi?

—Te ves linda —Adam lleva su dedo a las comisuras de la boca de Anna y las limpia, luego pasa la lengua por sus yemas

Anna lo mira desde abajo con el corazon acelerado. Ambos estan sudando y estan un poco sonrojados por el calor. Anna se habia quitado lo que cubria su cabeza y lo habia gardado en la mochila de Adam, asi que él decide quitarse la camisa y se amarra las mangas al rededor de su cadera.

—¿Vamos mas adentro? —señala un delgado camino

—Si, aun tenemos un poco de tiempo —dice Anna

—No debes preocuparte si nos dejan —le dice Adam mientras comienzan a caminar por el estrecho pasillo —se como regresar, ademas, aqui hay camellos para ir de regreso

—Esta bien —sonrie Anna

Adam pone sus manos en los hombros de Anna y la guia por los estrechos lugares hasta que llegan a un lugar donde hay cojines y les dicen que pueden tomar asiento sin ningun problema o costo, a solo que fueran a consumir algo. Se sientan y piden unas bebidas frias.

—¿Te estas divirtiendo? —le pregunta Adam a Anna y le aparta el cabello del cuello

—Si, aunque no me gusta el calor, estoy feliz de haber venido —lo voltea a ver cuando termina de hablar

Adam deja la bebida en una pequeña mesa frente a ellos y se inclina. Anna esperando que la besara, levanta un poco su cabeza, Adam agarra suavemente su quijada, pero cuando sus labios estan a punto de tocarse, la piel de Adam se eriza por completo y su rostro se vuelve frio, se aleja de Anna y mira por donde llegaron, ya que no hay otra entrada.

—¿Pasa algo?

—Senti... —mira fijamente el estrecho camino por donde llegaron —no me siento seguro aqui

—¿Porque? ¿Que ocurre?

—Alguien nos esta mirando

—Esta bien, somos extranjeros, la gente tiene curiosidad

—No esa clase de mirada —le dice mirandola a los ojos

Anna nota que el enserio esta preocupado.

—Paguemos y vamonos —le dice Anna

Adam se levanta y va a pagar por las bebidas casi llenas. Cuando se acerca de nuevo a Anna, toma su mano y salen de ahi. Anna casi va corriendo detras de Adam y ella entiende como se siente él, ya que el definitivamente la va protegiendo con su cuerpo, asi que con su otra mano toma el brazo de Adam y trata de tranquilizarlo de alguna forma.

Al salir de la gran carpa de mantas, ya varias personas subian a sus camellos. Adam suelta a Anna, le da la mochila y se pone su camisa.

—Te ves muy pensativo

Adam asiente por las palabras de Anna.

—No me gusta sentirme asi, trato de recordar a alguna persona que podria estarnos... —la mira preocupado y ella lo mira atentamente, asi que sacude su cabeza negando, no queria que ella se preocupara tambien —solo continuemos —suspira y toma su mochila de la mano de Anna

Lo que transcurre del viaje, Adam trata de disfrutarlo pero no puede dejar de pensar en lo que habia pasado y Anna notaba que Adam no estaba para nada comodo. La ultima parada del tour era una cascada donde ellos iban a poder tomar un baño refrescante y los camellos descanzar, y tomar agua. Todos se animan bastante al llegar y de inmediato entran al agua.

—Entrare primero, ¿vale? —le dice a Adam

—Ok, te sigo en un rato

Anna se quita la camisa manga larga, ya que andaba una camisa de tirantes adentro, se quita los zapatos y los calcentines, y entra. Anna se reune con la señora que habian conocido cuando llegaron y comienza a jugar con sus hijos. Adam se para en una roca y comeinza a tomar fotos de su al rededor y de las personas, luego simplemente se queda con Anna en su lente.

Adam sube un poquito mas y con el zoom de su camara, comienza a inspeccionar su alrededor, al notar que no hay nadie mas que ellos, decide tranquilizarse y entrar al agua, mete la camara en la mochila y saca la otra camara, se quita la ropa y se queda en boxer como los demas hombres y deja la ropa arriba de su mochila.

El agua esta tan fresca que Adam suspira al entrar, Anna se acerca a él.

—¿Como esta todo? —le sonrie

—Todo bien —sonrie Adam

Adam se pone de espalda y flota pasivo. Anna nada a su alrededor hasta que agarra el tobillo de Adam y lo unde. Adam sale a la superficie tosiendo por el agua que entro en su boca y nariz, mientras Anna se rie.

—Pudiste haberme matado —tose

—Ni que te hubiera undido amarrado a pesas —Adam pone los ojos en blanco

Anna se rie y lo abraza por la espalda. Anna restriega sus ojos y se pasa la mano por el cabello, mientras siente a Anna poner su cabeza en su hombro, Adam la mira.

—¿Que haces?

—Se siente bien estar asi —suspira y cierra los ojos

Adam mira hacia el frente y se queda ahi parado, sintiendo la respiracion de Anna en su cuello.

{...}

Al regreso, Adam casi lleva cargando a Anna, va tan cansada que apenas puede con su cuerpo, cuando llegan a la habitacion, ambos toman una ducha y deciden dormir un rato.

Cuando Adam despierta, Anna esta en su cama y ni sintio cuando se acosto a su lado. Adam que solo estaba en ropa interior, se pone un pans que lo ajusta a sus rodillas, una camiseta y unos tenis, y sale de la habitacion.

Adam se dirige a la piscina y se sienta en una de las mesas en la sombra, un camarero le lleva una cerveza y algo para acompañarla. Adam mira relajado a todos, pronto serian las seis, asi que el aire estaba bastante fresco a comparacion de la mañana. Un grupo de chicos se acercan a Adam y uno de ellos se sienta en la silla frente a Adam.

—Amigo, ¿te gustaria ir a una fiesta?

—Claro, ¿porque no?

—Unos chicos locales me invitaron en el mercadillo que queda cerca, parece que estara bastante buena

—Se escucha bien, ¿donde es?

El chico saca un papel de su bolsillo y lo extiende en la mesa.

—Ahi esta todo

—Genial, gracias —les sonrie

—Te vemos ahi —le sonrie una chica

—¿Llevas a alguien para bailar? —le pregunta otra

—Si, lo siento —sonrie Adam

—Que lastima —dice

Despues de hablar un rato, se van y Adam continua comiendo, y tomando de su cerveza. Pide otra cerveza a los minutos y continua bebiendo, su celular comienza a sonar y ve que es una llamada de Anna.

—¿Si?

—¿Donde estas?

—En la piscina

—¿Estas nadando?

—No, solo bebiendo algo y comiendo un poco

—Ya bajo

—Ok, te espero —cuelgan

Adam ha estado observando a toda la gente y a llegado a una conclusion bastante aburrida como el acto de pensar en una. Lleva la botella a sus labios y le da un trago, y justo cuando deja la botella en la mesa, un cuerpo cae sobre él, sobresaltandolo, pero se calma cuando ve que es Anna, ella lo abraza por el cuello.

—Me asustaste, ¿que pasa contigo ahora?

—Me siento cansada

—Entonces, simplemente te hubieras quedado en la habitacion

—Muy aburrido

Adam rie.

—Esta bien

Anna suspira.

—Lastima que estes tan cansada, iba a llevarte a una fiesta

—¿Fiesta? —se levanta Anna

—Si —asiente

—¡Vamos! —lo agarra de las mejillas

Adam rie.