Ya había transcurrido una semana y el día del compromiso por fin llegó, todo en aquel salón estaba perfectamente colocado, cada copa estaba servida de forma ordenada y cada aperitivo se encontraba en la mesa, Susan había insistido en ayudar en la decoración y Daphne no objetó, pues eso le daba un respiro a ella, así que había aceptado encantada. Daphne lucía un vestido color champagne con una abertura hasta el muslo y su cabello sutilmente levantado en una media coleta, la hacía ver más sexy de lo que ella quería, pero ya no había tiempo de elegir algo más sutil, así que ese fue el que se colocó. William portaba un traje de dos piezas color gris, era un hombre muy apuesto y este traje le quedaba a la medida, se ajustaba perfecto a sus anchos hombros y el pantalón caía con sutileza ajustá