Nicole se sentía sumamente molesta por la actitud infantil de Bruno, aquello no le parecía para nada gracioso, se levantó de donde estaba y se dirigió a él de manera cortante. —No veo la gracia por ningún lado. —Bruno parecía un n**o riendo de esa manera. —Lo siento mucho, para mí fue muy gracioso ver tu cara y la de Dante, eran dignas de fotografía jajaja, la verdad fue algo épico. —¿Para que me llamaste? —Dijo muy seria, él intentó recomponerse. —Mañana habrá una junta, te presentaré ante los directivos, así que prepárate porqué hablarás al frente y lo más seguro es que te bombardearan con preguntas para estar seguros de que estás capacitada para ocupar el puesto, yo se perfectamente que lo estás, pero debes demostrarselo a ellos. —Está bien, soy muy buena hablando, así que n