Culminando la ceremonia, cuando todos los invitados llegaron a la mansión Lanús, incluidos Thomas y Tania, esta se acercó a saludar a los padres de Thomas.
Esas dos personas fueron buenos con ella, estaba muy agradecida por haberla salvado de su padre. Recordar como este la vendió, apretó el corazón de Tania.
Primero pidió disculpas por no haberlos contactado en todo ese tiempo. No explicó cuales fueron los motivos que la llevó a perder el contacto con ellos.
Aunque ella no lo dijo, Eduany y Emilia sabían lo que había pasado. Llegó un tiempo en que Thomas no pudo seguir fingiendo más. Dijo la verdad el día en que una de sus hermanas empezó a decir que Tania había sido una mal agradecida por haberse ido y no contactar a sus padres.
Fue ahí cuando Thomas salió en defensa de su esposa
