Mi Compañero Maldito

Me despierto emocionada porque hoy es un día especial. Hoy es mi cumpleaños, por fin cumplo dieciocho. Rápidamente me refresco y bajo las escaleras donde mamá está preparando el desayuno en la cocina. Estoy segura de que está haciendo mi favorito. Somos de Dark Moon Pack. —Buenos días, querida—dice mamá mientras entro a la cocina. —Buenos días, mamá—digo, tomando asiento en el taburete de la cocina. Ella no es mi madre biológica. Mis padres murieron después de que yo naciera, así que no sé nada de ellos. Ella es la única madre que tengo, así que la amo como lo haría con mi verdadera madre. —¿Estás emocionada de tener dieciocho años hoy? —pregunta mamá, colocando un plato de panqueques de chocolate frente a mí. Son mis favoritos. —Gracias por el desayuno—le digo—. Por supuesto, estoy emocionada de cumplir dieciocho años. Si fuéramos humanos, finalmente podría salir de tu casa para que ya no me dijeras qué hacer. —Menos mal que no lo somos entonces—sonríe. —Incluso si lo fuéramos, nunca podría dejarte—digo, acercándola para abrazarla. —Yo también te amo, querida—dice, abrazándome. La bocina de un auto suena desde afuera. Y eso significaría que mi momento de salir está aquí. Rápidamente le doy un beso de despedida a mamá y camino afuera para encontrarme con mi novio. —¡Ni siquiera tocaste tu desayuno! —Mamá dice mientras me voy. —Llegaré tarde, adiós —digo y salgo por la puerta. —Hola, hermosa—dice Matt mientras salgo. Me está esperando junto a su coche. —Oye, guapo —digo, acercándome a él. Me atrae para besarme una vez que me acerco lo suficiente. —Bendecido cumpleaños—dice y me entrega una caja. —¡Gracias! ¿Qué me trajiste? —Pregunto, emocionada de ver lo que tiene. Lo abro para revelar un par de aretes de diamantes. —¿Te gustan? —¡Los amo, gracias! —Digo, tirando de él para darle un abrazo. —De nada. Matt es un humano. Como hombre lobo, las citas son un error para los humanos, pero no tengo otra opción. Mamá me prohibió aceptar a mi mate hombre lobo cuando lo conozca, así que no tengo más remedio que tener una relación con un humano. Es la opción que tengo para un poco de compañía y felicidad. No sé por qué mamá cree que debería estar con un humano en lugar de con mi pareja. He intentado preguntarle, pero nunca me ha dado una respuesta razonable aparte de que es la única forma de mantenerme a salvo. Matt me deja en la escuela. Voy a la universidad local. Mamá nunca me permitiría viajar lejos de ella. Si se saliera con la suya, preferiría que no fuera a la escuela. Ella no cree que los hombres lobo necesiten una educación. Quiero ser reportera. Y aunque mi sueño no se haga realidad, y soy una licántropa, no creo que el conocimiento que estoy adquiriendo sea inútil. Matt no va a la universidad y no planea hacerlo. Proviene de una familia humana adinerada, por lo que su futuro ya está determinado para él. Le doy un beso de despedida a Matt y entro para comenzar mi día.   ***   —¿Estás segura de que has pensado en esto? —Chloe pregunta mientras se acuesta en mi cama. Regresé de la escuela hace unas horas. Mi mejor amiga Chloe y yo nos estamos preparando para mi fiesta de cumpleaños en la casa de Matt. Mamá odia que los niños ensucien nuestra casa, así que celebraremos la fiesta allí. Su casa también es más grande, así que es mejor. —Sí. Hemos estado saliendo durante dos años. Se siente bien que me entregue a él. Planeo tener sexo por primera vez esta noche con Matt. Hemos estado saliendo desde mi tercer año en la escuela secundaria. Ha sido tan paciente conmigo y nunca trató de obligarme o presionarme para que me entregara a él, además ya soy legalmente adulta. —¿Qué hay de tu pareja? ¿Cómo crees que se sentiría si te entregaras a un humano? — preguntó Cloe. Ella es una licántropa como yo. —Mi mamá me ha prohibido estar con mi mate hombre lobo. Y por lo que sabemos, es posible que ya se haya acostado con alguien también—. Espero que lo haya hecho porque cuando lo conozca, me dará una razón para estar enojado con él y, con suerte, será más fácil rechazarlo. —No sé por qué tu mamá te prohíbe estar con tu compañero destinado. Sé que lo dice por tu propia seguridad, pero prefiero estar con mi pareja que sufrir dolor para siempre. Muchos hombres lobo no sobreviven sin su pareja. Algunos mueren mientras que otros se vuelven rebeldes. La mayoría vive con un dolor insoportable sin sus compañeros durante el resto de sus vidas. —Ella es mi mamá; ella sabe lo que es mejor para mí. —Tal vez lo haga, pero sigo pensando que deberías mantenerte para tu pareja. —Sé que eso es lo que piensas. Pero siento que Matt merece una oportunidad conmigo. —Está bien, lo que tú digas—dice, renunciando a toda esperanza de convencerme. Me pongo mi atuendo para la noche, un vestido ajustado de lentejuelas tinta con tacones negros y mi maquillaje. Cuando llegamos, el lugar está repleto de adolescentes. Siento que llego tarde a mi propia fiesta. Salimos del coche de Chloe y entramos. Una vez que estamos dentro, Chloe y yo vamos por caminos separados e intento encontrar a Matt. Lo veo bebiendo cerca del DJ con un par de sus amigos de la secundaria. —Hola, nena—dice Matt, poniendo sus brazos alrededor de mí y dándome un beso en la mejilla—. Te ves hermosa como siempre—dice, susurrando en mis oídos por encima de la música a todo volumen. —Gracias—le digo, envolviendo mis brazos alrededor de él. —Vamos, vamos a bailar—dice, llevándonos a un área en la sala de estar donde la gente está “bailando” tan íntimamente que prácticamente están teniendo sexo con la ropa puesta. Pasa una hora más o menos y la fiesta va genial. Todos mis amigos, tanto humanos como hombres lobo, están aquí. Matt se fue para hacer algo, y ha pasado un tiempo desde que lo vi. Decido buscarlo por la casa, revisando todas las habitaciones de arriba por si se queda dormido mientras busca el baño, pero no lo encuentro. Casi me rindo, pero recuerdo que no miré en la habitación de sus padres. Matt suele cerrar con llave la habitación de sus padres durante las fiestas para evitar que alguien entre a tener relaciones sexuales en la cama de sus padres. No llamo a la puerta antes de entrar porque si estuviera abierta, solo Matt estaría adentro. No estoy equivocada. Lo que no pensé fue encontrarme al mismísimo Matt teniendo sexo con otra persona. —¡Matt! —Grito, sorprendida de que me haga esto. No puedo creer que esté acostado con otra chica en mi cumpleaños. ¡En mi fiesta de cumpleaños! ¿Cómo pudo hacerme esto? —¡Liz, no es lo que piensas! —Matt dice, bajando de la chica. no la reconozco —¿No es lo que pienso? —pregunto, sintiendo que se me quiebra la voz porque estoy a punto de empezar a llorar. Iba a darle mi virginidad a este hombre esta noche y en cambio lo encontré en la cama con otra mujer. Me siento tan tonta. —No es lo que piensas, puedo explicarlo—dice, caminando hacia mí, tratando de tocarme con las mismas manos sucias que tenía con esa chica. —No te atrevas a tocarme—le digo mientras las lágrimas caen por mis mejillas. No pierdo ni un segundo más en la habitación, me doy la vuelta y salgo corriendo antes de que me vea llorando. No se merece mis lágrimas. Lo escucho decir mi nombre, pero actúo como si no pudiera escucharlo y sigo caminando. No dejo de caminar ni siquiera cuando salgo. No quiero estar cerca de él, así que sigo caminando hasta que mis piernas no pueden avanzar más.   Camino durante casi dos horas. Estoy segura de que mi madre y Chloe están muy preocupadas por mí. No sé qué tan lejos estoy, pero debo estar lejos porque no me importa vincular con Chloe. Decido comenzar a caminar de regreso por donde vine. Estoy llorando todo el camino. Todo lo que veo a mi alrededor son árboles altos y creo que estoy perdida. Sigo caminando, con la esperanza de encontrar algún lugar donde pueda cargar mi teléfono o encontrarme con alguien que me preste el suyo. Me siento cansada, así que decido tomar un descanso junto a un pequeño estanque. No me di cuenta de que este sería el mayor error de mi vida. Mientras trato de ponerme cómoda junto al estanque, escucho ruidos en el bosque. Aspiro su olor e inmediatamente sé que son rebeldes. Huelen horrible y parecen casi muertos. Tres pícaros aparecen frente a mí y así es como se ven: muertos. Rápidamente cambio a mi forma de lobo y me preparo para el ataque. Mi loba es una hermosa blanca llamada Eva. Puedo sentirla preparándose para destrozar a estos pícaros con sus afilados dientes. “Ha pasado un tiempo desde que me dejaste salir” dice Eva. “Eso es porque te negaste a hablar conmigo durante dos años'. “¿Y de quién es la culpa?' "No puedo creer que dejaste de hablarme porque comencé a salir con Matt". "Por mucho que me encantaría discutir contigo, mi precioso ser humano, tenemos compañía y parece que nos matarán en cualquier momento". "Más tarde", digo y trato de centrar nuestra atención en la amenaza en cuestión. No soy la mejor loba en el combate, pero nunca retrocederé en una pelea. A pesar de lo luchadora que es Eva, ella tampoco lo hará. Tres monstruos me rodean, el que está a mi derecha ataca primero. Intenta agarrarme del hombro con los dientes, pero me alejo antes de que pueda. Pensé que estaba tomando la delantera hasta que me doy cuenta de que el pícaro de la izquierda me ha enganchado. Atrapa mi hombro izquierdo con su boca mientras trato de alejarlo con mis garras. No tengo suficiente tiempo para arrancar al pícaro cuando el que está en el centro me ataca. Captura mi pata en su boca y cuando sus dientes perforan mi carne, un grito doloroso escapa de mi boca. Clavo mis dientes en el cuello del pícaro y lo arrojo lejos. Puedo arrojarlo contra un árbol y pierde el conocimiento. Uno menos, quedan dos. O eso pensé. De repente, más pícaros aparecen del bosque. Ni siquiera me he quitado a este pícaro del hombro. ¿Cómo voy a luchar contra todos ellos? Puedo ver mi muerte destellando ante mis ojos, pero no retrocederé. Lucharé por mi vida hasta mi último aliento. Uso mi pata y mis dientes para sacar al pícaro de mi hombro. Él o ella estuvo allí por un tiempo y puedo sentir dolor en mi hombro. Lucho contra tantos monstruos como puedo. Creo que, si sobreviví a esto, merezco darme un premio. Siento que han desgarrado cada parte de mí, pero no retrocedo. No puedo. Si lo hago, me comerán. Estoy a punto de atacar a otro pícaro cuando el olor más embriagador se desliza por mi nariz. No puedo identificar exactamente a qué huele, pero es una mezcla de bosque cuando llueve y levanta polvillo húmedo. Huele divino. Eva de repente comienza a distraerse de la amenaza frente a nosotros y se enfoca en el olor. “¿Cómo puedes estar enfocándote en eso en este momento?” Pregunto. Pero Eva me ignora y trata de averiguar de dónde viene el olor. Dos lobos me derribaron. Mi pequeña conversación con Eva me dejó distraída y nos va a matar. Trato de sacarlos, pero fallo miserablemente porque estoy gravemente herido. Puedo sentir que me desvanezco lentamente, pero aguanto hasta que parece que toda esperanza se ha ido. De repente, el olor misterioso se vuelve más fuerte. Aparece el lobo más grande que he visto en mi vida. Es el lobo más hermoso que he visto en mi vida. Él es tan oscuro como el cielo nocturno. Gruñe y el suelo debajo de nosotros tiembla con lo poderoso que es. Él es un Alfa. Los pícaros me sueltan rápidamente y corren para salvar sus vidas. De hecho, huyen. Intento pararme sobre mis patas, pero fallo. Estoy mal herida. El Alfa da un paso cuidadoso hacia mí y Eva comienza a bailar en mi cabeza. Me pregunto por qué está tan alegre. Fuimos salvados, pero todavía siento que vamos a morir. Solo cuando Eva habla entiendo completamente. “Mi mate.” Antes de que pueda procesar la palabra, empiezo a sentirme mareada. Lo último que veo es a nuestro mate cambiando a forma humana antes de que la oscuridad me lleve.