Gabriel abrió el sobre enseguida, se encontró con una hoja de papel que tenía un mensaje con letras recortadas que decía:
— Pedimos la cantidad de un millón de dólares en 48 horas, a cambio de entregarle con vida a Camilo Bracamontes.
Gabriel arrugó el papel y lo apretó en su puño, mientras Elizabeth lo miraba aterrada y temblorosa.
— ¿Pero qué pasa Gabriel? ¿Qué dice ese papel? Por favor no me dejes así con esta angustia.
— Esto es una locura, no puedo hacer nada; están pidiendo una suma de dinero con la que no cuento.
— Elizabeth se acercó a él mientras rodaba su silla de ruedas, alzó sus manos hasta donde podía alcanzarlo y le dijo suplicante:
— Por favor Gabriel, algo tienes que hacer, no podemos dejar que maten a mi tío, recuerda que me casé contigo a cambio de que le perdonaras
