Llevé las manos a mis pechos para taparlos, estaba completamente avergonzada. No demoró que yo sintiera el calor subir por mi cuello hasta mis mejillas, estaba completamente roja y era de entender, es que mi jefe, precisamente ese hombre, me había visto sin sostén. —Yo, no e-estoy buscando nada —cerré mis ojos, dándole la espalda. No sé por qué me atacaba el nerviosismo justo ahora, me sentía trastornada y temía que fuera por el hombre detrás de mí. El señor Norton no habló y lo agradecí, lo menos que quiero es que me diga algo que me haga sentir peor de lo que ya me siento. ¿De verdad pensó que estaba así por él? Por favor, yo no busco llamar la atención de los hombres, y menos lo haría de esta manera. Claro que lo que había pasado entre nosotros, destruía completamente ese argument