Capítulo 34
Dormiste dos días y medio
‘pero ¿qué diablos le ocurre a la gente hoy?, ¿están poseídos? ¿o qué?’
Alargando la crema dental sobre las cerdas del cepillo de dientes estaba tan irritado que podía golpear a alguien, por lo que decidí, mientras me lavaba los dientes intentar ignorar todos los sonidos molestos que me rodean, porque ya mi humor es pésimo y tiene la capacidad de empeorar, abrí las ventanas y calculé que he podido dormir aproximadamente 8 horas, porque solo veo el atardecer.
En unos pocos instantes terminé de asearme, aún demasiado enojado porque no ha parado de sonar el endemoniado teléfono responsable de mi mal humor, lo miré con desprecio unos 3 segundos ¡como si al aparato le importara mi mirada! y finalmente me resigné a contestarlo.
Del otro lado de la línea
