Capítulo 67 Son poderosos, pero disfuncionales Narra Mariano La vi huir despavorida de mí, caminando como un rayo por los corredores, como si yo fuera el lobo feroz y quisiera comérmela, negué con la cabeza, tiene suerte de que no haya cámaras que le muestren en otro momento que fue ella quien estuvo a punto de tragarme entero como un megalodón. Nunca, en mis sueños más perros, locos y salvajes me hubiera imaginado tener este extraño fetiche por las niñas problemáticas, o debo decir, las mujeres que se comportan como tal, pero, definitivamente estoy en un lío conmigo mismo, si vuelvo a cambiar de opinión y la follo, sería la primera persona, que al entrar en mi vida, me haga cambiar de decisión tres veces en una semana, diciéndolo a modo de resignación, porque no han transcurrido ni si