Abby no podía ocultar su asombro, se había incluso quedado pasmada al ver que Zack la había defendido de aquel hombre vil. Zack no dijo una sola palabra durante el regreso a la mansión. Después de entrar, se fue directamente al despacho sin decir nada. Se sirve un Whisky y luego otro mas, la pelea con aquel colega lo había dejado inquieto. Abby de repente entra al despacho, interrumpe aquel momento de soledad de Zack. —Zack quiero agradecerte porque me defendiste de ese tipo— Dijo Abby avergonzada. —Aunque se que él tuvo razón en muchas de sus palabras, jamás permitiría que le faltaran al respecto a una mujer delante de mis narices— Le responde con una plena tranquilidad. Abby siente que no puede reprochar lo que piensa de ella, después de todo las circunstancias se dieron de manera