Los días pasaron y se completó mi tiempo límite de estar en casa. Las festividades navideñas están próximas a ser celebradas una vez más y mi intención de viajar lo más pronto posible son aplastadas con tan solo un mensaje: “Hello, hello. My Darling. No es necesario que regreses. Debido a las festividades es imposible que podamos continuar con los avances, ya sabes cómo se pone todo el mundo, además, hemos trabajado tan duro durante todo el año que estamos más que adelantados a la planificación inicial. Diviértete en casa y paso tiempo con tu familia. Nos vemos el próximo año.” _ ¿Qué demonios? Marco el número de Abel y la llamada va directo al buzón de voz, intento una vez más, pero el resultado es el mismo, no teniendo otra opción me resigno a quedarme en casa para realizar