Ese día regresé a mi departamento directo desde la oficina de mi padre, no volví a mi escritorio porque prefería no ver al hombre causante de mi tristeza, mi padre se ofreció recoger mis cosas y enviármelas por la tarde a mi departamento, además, debía empacar las cosas que llevaría y dado que Abel se encargaría de arreglar mi vivienda y conseguirme un auto no preocupe por mis muebles, solo empaque ropa, zapatos, mi computadora y algunos libros que necesitaba para la realización de mi tesis. Ese era un tema que me preocupaba un poco puesto que tenía que tenía un año para presentarla y solo me quedaban cuatro meses, no es que haya estado atrasada, pero no tenía planificado ir de viaje y me preguntaba si podría volver a tiempo.
En la otra habitación mi paciente estaba dormido desde la n
