Destinada a ti

Suelta a mi prometida

Me alegra que papá confíe en mi pero debo admitir que estoy asustada, es un proyecto enorme y ambicioso, sin contar que tendré que trabajar con Matthew el y yo parecemos perros y gatos, pero bueno.

Al volver a la oficina me dedico a estudiar el proyecto quiero empaparme totalmente de el, quiero que papá no se arrepienta de haber confiado en mi, Chase no dejo de llamar todo el día a la oficina y a mi celular, parece que no tiene nada mejor que hacer, pero ignore todas y cada una de sus llamadas.

Al salir de la oficina me dirigí a casa, tuve un día muy ocupado pero eso me distrajo de los problemas de mi vida personal.

Estacione mi auto y al parecer los estacionamientos son los lugares favoritos de Chase ahora por que a penas baje del auto este me acorralo entre el y el auto

-qué quieres - dije entre dientes muy molesta, su cercanía me hace sentir asqueada

-amor - dijo acariciando mi mejilla - quiero que me escuches, no es lo que tu crees

-no, entonces que fue lo que vi

-ella me tentó, soy hombre, y caí una vez, sentía culpa pero ella me chantajeo con contarte si no volvía a estar con ella, sabes que soy muy bueno en la cama, ella no se pudo resistir y siempre pedía más al parecer Matthew no la complacía

-eres un asqueroso

-vas a decir que no disfrutas estar entre mis brazos

-suéltame Chase

-vamos Rachelle se que me amas y me deseas - estuvo a punto de besarme pero la imagen de el con Estela llego a mi mente y aparte mi rostro

-dejame, podré amarte pero no permitiré qué me falten nunca el respeto, si me amaras así ella se te presentará desnudate jamás la hubieras tocado

-Rachelle ese tipo de hombres no existen y lo sabes, sabes que todos hubiésemos caído si una chica linda se nos insinúa

-tu patética excusa solo empeora las cosas - tomo mi mentón con fuerza

-escuchame bien Rachelle, te casaras conmigo te guste o no, eres mi mujer y tu haces lo que yo digo

-ni en tus sueños haré lo que tu me ordenes, la boda esta cancelada

-veamos si después de fo**arte piensas lo mismo - comenzó a tocar mi cuerpo con desesperación y a querer sacarme la ropa a la fuerza, yo estaba aterrada de lo que el estaba a punto de hacerme pero un momento de lucidez llego a mi, tome su rostro entre mis manos y lo bese, el se relajo y la agrasividad de hace rato fue mermando cuando tuve la oportunidad lo golpee en los bajos con la rodilla, el se agachó adolorido y yo aproveche para apartarlo de mi

-no se te ocurra volver a ponerme una mano encima infeliz

-eres una pe**a Rachelle, vas a pagar por esto

Corrí tan rápido como pude al ascensor no me importo dejar mis tacones atrás, el venía detrás y el maldito ascensor no se apuraba, Chase se acercaba amenazadoramente cuando las puertas del ascensor se abrieron choque con un cuerpo fornido, no conozco al tipo rubio de ojos azules con el que choque solo se que vive en el edificio, por el miedo no dude en pedirle ayuda, el me tomo de los hombros para evitar que cayera, me miró con cara de preocupación, creo que mi aspecto hablaba por si solo

-estas bien - pregunto el rubio

-no - comencé a llorar

-suelta a mi prometida - gruñó Chese una vez estuvo cerca de nosotros

-no es mi prometido - le dije al rubio temblando de miedo

-entiendo - contesto el rubio quien transformó su mirada amable hacia mi por un semblante frío y desafiante - la señorita dice que no eres su prometido, si no quieres que llame a seguridad será mejor que te largues de aquí

-no te metas, no es tu asunto, quita tus manos de ella - el rubio me coloco detrás de él

-si te acercas un paso más a ella me encargaré personalmente de que pases un período tras las rejas, te he visto en este edificio pero se bien que no vives aquí, debes saber que tipo de personas somos las que nos podemos permitir vivir en este lugar así que mientras soy amable te digo que la dejes tranquila de lo contrario me encargaré qué no veas la luz del sol en un largo rato

Chase lo miro desafiante y su mirada iba del rubio a mi pero al final acepto

-esto no se va a quedar así Rachelle - dijo Chase antes de darse la vuelta e irse el rubio giro a mi

-estas bien - pregunto y yo todo lo que hice fue llorar el me consoló, si un extraño me consoló en el estacionamiento de mi edificio, qué vergüenza lo peor es que es mi vecino - tranquila, ya estas a salvo

-muchas gracias - dije cuando por fin me calme

-no fue nada, por cierto soy Natan tu eres Rachelle cierto - dijo extendiendo su mano con una sonrisa amable

-mucho gusto Natan y disculpa lo que sucedió

-no se que sucede entre tu y el, pensé que eran novios pero si ya no lo son no deberías andar sola por un tiempo, se que los guardaespaldas pueden parecer tediosos pero a veces son necesarios al menos por un tiempo

-lo sé lo tendré en consideración

-vamos, sube a tu apartamento, si quieres te acompaño

-no, no te preocupes estoy bien

-segura

-si, muchas gracias de nuevo

-no te preocupes, te veo después - dijo antes de guiarme al ascensor y que este cerrará las puertas

Solté un gran suspiro no se que hubiera pasado si no me topo con Natan, qué vergüenza ahora como lo mirare a los ojos, veo mi reflejo en las puertas del ascensor y realmente luzco terrible, llego a mi piso y a mi puerta, una vez dentro de mi apartamento parece que me siento abrumada por todo lo que acabo de vivir hace unos minutos deslizó mi cuerpo por la puerta y caigo sentada me deshago en llanto como es que la persona que ame me hizo eso, casi abuso de mi, como es que dice amarme, el solo pensar en lo que pudo pasar me hace sentir aterrada, soy un mar de lágrimas y el miedo comienza a invadirme, ese no es el Chase qué yo conozco, ese Chase me da miedo, lloro hasta quedarme sin más lagrimas, van dos días seguidos en los que me ahogo en llanto por culpa de la misma persona.