Había transcurrido otra semana mas en el navío que iba rumbo al reino de Elwen, por suerte ya habían pasado la zona más fría del mar, por lo que el clima, aunque todavía continuaba en temperaturas bajo cero, era mas llevadero. Es por ese motivo que el rey Bastian decidió zarpar rumbo al reino de Severin para hacerles una “visita” y así ver qué información de importancia podía traerles a los dos reyes que, continuaron con Annia durante el viaje el cual le estaba pareciendo eterno, ya que estar tanto tiempo encerrada junto con el rey Serkan luego del encuentro que tuvieron días atrás, le estaba resultando más difícil de lo que imaginó.
Sus ansias por querer repetir aquella situación estaban haciendo que la luna se sintiera una pervertida, porque ella todas las noches recordaba los besos del
